*
Los pétalos del mundo van hacia el infinito
divagando con piedras de silencio,
mientras la brisa gime junto a un sauce.
Una luz dilatada
diluye la existencia
de la sal
consagrada a diosas frías.
La música del agua
se disocia en los círculos de fuego.
El pulso del mutismo
alcanza las esferas del crepúsculo,
en un velo de amor.
Latidos entre niebla
en vórtices de lluvia
sorprenden a la nada.
Ana Muela Sopeña
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4 comentarios:
Esta imágen me fascinó
Un beso
Rossana
Latidos entre niebla
en vórtices de lluvia
sorprenden a la nada.
Gracias, Rossana, por tus palabras.
Besitos
Ana
Coincido con Rossana, el final muy bueno.Gracias por todo el poema.
Mis felicitaciones
Jesús, es una grata sorpresa encontrarte por aquí.
Te dejo un abrazo desde la poesía
Ana
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