miércoles, 19 de agosto de 2009

TIEMPO DE LA HERIDA

*
.....Al terminar el tiempo de la herida se ensanchó la mirada en el espejo y pude alimentarme de la niebla, como si el mundo fuese una semilla. Camino sin un rumbo por la cuerda, donde la sal recubre el epitafio. Las sombras adheridas a la bruma me llevan al umbral de otro universo.
*
Descubro nuevos rostros,
nuevos nombres,
dispersos en jardines.

.....En códigos secretos que se ocultan en tablas jeroglíficas, los círculos del agua me muestran los crepúsculos, donde me bebo un té, con canela y limón que me desliza a espacios de acrobacias.
*
Al terminar el tiempo del abismo
comienzo a estar contigo
y surge mi deseo en la neblina,
como un sueño de alas
y raíces.


Ana Muela Sopeña

2 comentarios:

Manuel dijo...

Como un sueño de alas y raíces, sí.

Es genial deslizarse en tus palabras, meiga, el sueño cicatriza las heridas, como si tuviese alas de fuego.

Es genial saber de tu grandeza.

Un beso
Manuel

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Manuel, por pasar y dejarme tu huella.

Un abrazo grande
Ana