*
Fue un déjà vu prendido en el cristal
durante el sueño blanco del otoño,
mientras la luz del alba
envolvía mi extrañeza.
Por lugares abiertos al asombro
la niebla nos unió con sus tentáculos
y un perfume almizclado
fue palidez de mil espejos.
La luna en su girar nos ofreció
los círculos amados de la piel,
en sutileza, sin heridas.
Un desierto muy frío
en la emoción desnuda, en la distancia,
como oportunidad de otro universo...
Ana Muela Sopeña
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4 comentarios:
la palabra misma es una oportunidad a otros universos... esa sería una buena síntesis de tu poética.
Un beso
Marian
Totalmente de acuerdo con Marian, sí, como un déjà vu prendido en el cristal de tu cósmica mirada que nos lleva hasta el origen de la luz...
Un beso
Manuel
Marian, es alegre encontrar entre mis palabras, como un déjà vu...
Un beso
Ana
Manuel, gracias por tus palabras.
Un beso de meiga
Ana
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