*
La tristeza se mueve entre las sombras,
en guaridas de lobos
que aúllan en la noche con el humo.
Mis lágrimas de exilio
se derraman por huecos de la herida,
en la extrañeza gélida del mundo.
El vacío sucede
a la penumbra de la rosa,
mientras el tiempo avanza entre los círculos.
Caminos de misterio
en líneas paralelas de la Tierra,
por el espacio cóncavo del agua.
Ana Muela Sopeña
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2 comentarios:
Sublime, como siempre. La belleza se derrama en este hermoso engarzar palabras y sensibilidad.
Me encanta el titulo.
Un fuerte abrazo.
Perfecto, me encanta que el poema te haya gustado.
Un beso, amigo
Ana
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