sábado, 31 de octubre de 2009


TERCERA MISIVA A DON JUAN TENORIO

*
Me habláis de amor y no os creo,
más bien pienso que es apuesta,
para ganar duelo y a esta
soñadora del deseo.
Pero si algún día veo
que vuestro amor es real
os invitaré al umbral
de mi oscuro sentimiento.
Y ahora sed como el viento,
no dejad huellas de sal.


Ana Muela Sopeña

SEGUNDA MISIVA A DON JUAN TENORIO

*
Ya no cabe vuelta atrás
vos sabéis que es imposible,
salvo que os haga invisible,
ya no existe más quizás.
Mi pasión quedó ya tras
las historias y el olvido,
me parecéis aburrido.
Ahora sólo la muerte
os dará la bella suerte,
mientras tanto sed caído.


Ana Muela Sopeña

LA ROSA SE CONTENTA

*
La rosa se contenta con ser rosa,
no persigue ser fuente ni raíz.


Ana Muela Sopeña

MISIVA A DON JUAN TENORIO

*
La violación fue a otra dama
yo fui queriendo a la alcoba,
me hicisteis ser una loba,
pero vos...de cama en cama.
Ahora el sol se encarama
sobre un árbol y su leño,
dentro de mi ser de sueño.
Os doy vino en un cristal,
susurradme algo especial
antes de daros beleño.


Ana Muela Sopeña

SEMILLAS DEL ALBA

*
Una luz en la niebla
me avisa por las noches,
me dice que tu voz está muy próxima.

Silencio sobre ti, en semillas del alba,
para soñarte siempre en desnudez.

La sombra de la bruma
me inspira cuando escucho
el sonido del agua en tu piel lúbrica.

Crepúsculo de ausencia sobre mi mar de jade
que no olvida tus párpados de luna.


Ana Muela Sopeña

EN EL VÉRTIGO DEL AGUA

*
Desciendes
por el laberinto del silencio,
para soñar sin límite en el vértigo del agua.

Acudes
cada mañana a una cita con las letras de fuego
que se esconden entre los cúmulos.

La penumbra te inunda suavemente

y una luz
itinerante y lúdica
te lleva por la ruta del deseo.


Ana Muela Sopeña

SUEÑOS EN LA ARENA

*
Te recuerdo
en mitad del océano simbiótico,
buscando los presagios
del laberinto de la rosa.

Intentas que la sal de la palabra
se refleje en el agua
y yo voy deslizándome a la luz,
mientras tú esculpes sueños en la arena.


Ana Muela Sopeña

viernes, 30 de octubre de 2009


ANAINÉS A DON JUAN TENORIO

*
Rememorando la figura de Don Juan Tenorio
el 1 de noviembre

Don Juan hizo de mí triste ultrajada,
su promesa rompió en la violación
y me dejó llorando de pasión
en medio de la luz más asombrada.

Una tarde me supe abandonada,
se rompió suavemente la ilusión,
recibí una estocada al corazón
que me dejó cual luna malograda.

Ahora sólo tengo soledad,
seducida en abismos de la noche
y fría me estremezco sin su piel.

Ojalá que la muerte, ya a su edad,
lo atrape por la espalda, como broche
de este infame teatro de papel.


Ana Muela Sopeña

CÁLIZ ROJO

*
En sueños del amor te obsequio el cáliz rojo,
con espejos de azurita y destinos de belleza.

Tu tiempo entre mis manos, mis yemas en tu piel,
en mi vientre tu mundo, mi lluvia por tu sombra.

Sabes que amo
tu saliva de sal,
con silicio de escarcha.

Una luz en mi éxtasis derrite tu pulso de los cuásares.

Tu miedo se desliza hacia mi océano
con rocío en un pétalo de ausencia.


Ana Muela Sopeña

ME DESNUDO EN EL MAR

*
Me desnudo en el mar de tu silencio,
te desnudas de sal,
surcas mi espacio.

Nos desnudamos juntos en la ausencia.

Me visto en la palabra,
recoges de los números el símbolo,
atraviesas mi luz fuera del tiempo.

Nos envolvemos juntos bajo el agua.


Ana Muela Sopeña

PÉTALOS DE FUEGO

*
La nostalgia me enreda
en mundos consagrados al silencio,

donde miro el espacio
de un bosque primigenio.

Melancolía antigua en el ambiente,
cuando busco tus labios en espejos
para soñar con lunas de papel.

Nenúfares de lagos en crepúsculos
reflejan en mi vientre
tus palabras perdidas,
en pétalos de fuego sumergido.


Ana Muela Sopeña

jueves, 29 de octubre de 2009


LA SOLEDAD ME LLEVA

*
La soledad me lleva por lugares
de laberintos de agua.

El aire de la noche
me entrelaza
con rocas de silencio.

La mañana promete espacios entre huellas,
para soñar despiertos.

La tarde lujuriosa entrega a mi piel yámbica
el ritmo de las sílabas dormidas.


Ana Muela Sopeña

VOCALES SUAVES

*
Entre palabras,
la belleza del ónix.
Vocales suaves.


Ana Muela Sopeña

ESTE OTOÑO

*
Este otoño el color es la tristeza
que se viste de sombras en el cielo,
mientras yo en un espejo miro el hielo
que emana de tu piel en la maleza.

Ahora yo persigo la belleza
en medio de la luz y un violonchelo
que llora con su música en mi pelo,
dejándome soñar con tu entereza.

Propongo que la noche sea un nombre
atrapado en el hueco del amor,
para salir al mundo en un pronombre.

Quisiera que parara ya el dolor
y ver sobre un cristal que eres el hombre
consagrado a mi historia en una flor.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 28 de octubre de 2009


LUNA Y RITUAL

*
A Pere Bessó, con mi amistad y admiración
A propósito de su poemario "Només per a dones"

A veces un poema
se oculta entre las rocas
y puede estar allí durante años,
persiguiendo la luz.

A veces un naufragio
permite que los versos
se sumerjan entre algas y vocales.

Un día,
un libro se presenta
con su liturgia y danza
y emerge de las sombras,
para escenificar luna y ritual...


Ana Muela Sopeña

LA LUZ ES UN RECLAMO

*
La luz es un reclamo del espíritu
para vencer a sombras subterráneas.

A veces la ceguera nos impide
caminar por la vía,
pero la luz nos llama
hacia sueños velados.


Ana Muela Sopeña

UN ECLIPSE LUNAR

*
Un eclipse lunar me lleva a ti,
a tu piel que se oculta entre las nubes
con la sal de un pasado aún latente.

Asteroides amados se rebelan
con lava
primigenia,

como esperma que brota de los vórtices,
entre papeles vírgenes.

Mi útero no sabe de lo oculto,
es un volcán que grita en erupción
sobre púlsares lúbricos.

Un espermatozoide de los cuásares
deambula entre las olas del océano
y deposita en piedras su legado.

El ovario del aire
permite que los hilos de la seda
me sumerjan en agua, entre los códigos.

Un óvulo enigmático
atraviesa submundos de silencio,

al tiempo que la luz
se diluye en penumbra.


Ana Muela Sopeña

PÁNICO A MI PIEL

*
El miedo a la emoción es ancestral,
es una fosa llena de delirios,
como agua que se estanca
y un murciélago que hace malabares.

El pánico a mi piel te desmenuza
en el ojo de un sueño sin raíces,
con aire detenido en pesadillas
como reptil atado a la distancia.

El terror de mis brazos es arcaico.
Entre maleza surgen cuerdas-trampa,
con fuego desafiando a la intemperie.

Disolución de mundos en mi cuerpo,
sobre un árbol helado, sin historia,
en la tierra del ámbar.


Ana Muela Sopeña

CITA

*
Yo,
luna,
contigo,
en tus labios,
mientras el alba
sonríe sin prisa,
a través de los arbustos
en las playas del otoño.
Y tus caricias llenan cálidas
el deseo del mundo en mi piel.
Nuestra cita es regalo de las diosas.
El crepúsculo trae las cenizas
de la belleza de las prímulas,
en los árboles de nieve.
Te contemplo en relojes,
en aguas de ónix.
Cuando me duermo
nuestra cita
no olvido.
Plata
Tú.
*
*
Ana Muela Sopeña

martes, 27 de octubre de 2009


DIRECCIONES

*
Al norte yo quisiera ser la luz,
guiar hacia moradas de la luna
y descubrir estrellas escondidas.

Al sur profundizar en los secretos
de un mundo traicionado por la sombra.

Al este disfrutar del juego lúdico
en el ramaje azul de mi niñez,
saturada del agua sin historia.

Al oeste deseo ser etérea,
para viajar sin demora
al país de nunca jamás.


Ana Muela Sopeña

ALBA DORMIDA

*
Alba dormida
sobre espuma de océano.
Se ven gaviotas.


Ana Muela Sopeña

ENTRÉGAME TU CUEVA DEL EXILIO

*
Entrégame tu cueva del exilio,
vestida en el misterio de tu mundo.

Abrázame en umbrales de la luna
y escribe sin tardar,
con la caligrafía de los bosques,
en mi cuaderno secreto.

Rózame con tus dedos
la piel de las galaxias invisibles.

Susúrrame palabras desde el sueño,
en la noche perdida.

Ampárame en la niebla del abismo,
cuando las sombras salen de sus grutas.


Ana Muela Sopeña

lunes, 26 de octubre de 2009


BÚHO INMÓVIL

*
Un búho inmóvil
en su rama de sueño,
como un presagio.


Ana Muela Sopeña

LUGARES DE SILENCIO

*
I
Una rama de pino
me lleva por lugares de silencio.

II
Tras las cenizas áureas de la tarde
encontré tu orfandad en una herida,
con estrellas amadas en lo oscuro.

III
Humo en el cuerpo
del éxtasis de ausencia.
Inspiración.

IV
Respiro entre la arena,
con relojes de agua.
Un niño en bicicleta mira al cielo.

V
El árbol de la vida
se muestra con las dudas de la noche.

VI
Las ramas del misterio
me enseñan que el abismo no se asombra
de los ojos de la nada.

VII
Noche desierta
en la melancolía de tu piel.
Yo te susurro.

VIII
La distancia me llena de tristeza
me arroja al territorio de la sangre,
donde un búho nocturno nos vigila.

IX
Dame tu miedo
en mitad de la niebla.
Sueños y lirios.

X
Crepúsculos de bruma en el naufragio
te acompañan por cumbres de nostalgia.

XI
Entierra tu dolor
en un hoyo profundo,
donde no llegue el viento de la herida.

XII
Entrégame unas letras
que me permitan ser ninfa del bosque.

XIII
Entre las moras
los duendes comunican sus presagios,
mientras rosas sonámbulas me duermen.

XIV
Nudos de voces,
pasados sin historia,
en desnudez.

XV
Árbol del mundo
sobre tu piel amada.
Deseo en vórtices.

XVI
Los huesos se rebelan con mi sombra
para dejarte solo, sin disfraces.

XVII
Te obsequio con cerezas de pasión,
como en los cuentos.

XVIII
Lluvia de invierno,
para encontrar el hilo de las cuevas.
Umbral sin pánico.

XIX
Noray de hielo,
tus cuerdas adheridas a otros rostros.
Disolución.

XX
La neblina del aire me posee
y me retorna a ti,
salvaje y muda.

XXI
Océanos con rosas
sobre la evolución del Homo Sapiens.
Darwin lee a Homero.

XXII
El infinito
se abre como un loto,
en la estación del tiempo y de las flores.
Portal de Altair.


Ana Muela Sopeña

*****

Altair: Estrella de la constelación de Aquila

domingo, 25 de octubre de 2009


AYÚDAME A SOPLAR

*
Aýudame a soplar sobre los grises
de esta tarde lluviosa, con la niebla,
para que el sol de otoño
ilumine mi alma desolada.

Ayúdame a soplar sobre lo negro
de esta noche tan fría

que entre su bruma dulce y melancólica
encuentre yo el motivo de la sombra
sobre la luz de un sueño desterrado.


Ana Muela Sopeña

VERSÍCULOS DE FUEGO

*
Versículos de fuego en el mutismo
atraviesan la herida más atávica,
donde los cuerpos gritan por la escarcha.

Las vocales en llamas se rebelan
por el rapto del mundo,

intangibilidad de la desidia.

Las letras son el bálsamo
que roba la nostalgia de la luna,
para entregar al sueño textos híbridos.

Las consonantes muestran como antorchas
las rutas en el alba.

El verso es el recurso,
que me envuelve en los círculos del tiempo
para vencer al dios de la inmemoria.


Ana Muela Sopeña

sábado, 24 de octubre de 2009

DESDE MI TRISTEZA

*
.....Desde mi tristeza te saludo con rosas recogidas de la sombra, en el salón de los espejos. Aún quiero ofrecerte mi sonrisa en este otoño extraño y deslizarme cálida hacia un encuentro oculto en el delirio. Sueños de perdición o de sonámbulos abrazos, en la palabra fértil o en el rincón oscuro del eclipse.
.....Un territorio nuevo, quizás podría ser...Acepta mi energía del océano, para elevar tu estrella con el pájaro azul de la belleza. Acepto tu cascada en jeroglífico, para llegar a tiempo a la consagración del azahar.
*
*
Ana Muela Sopeña

DÍAS DE AUSENCIA

*
Días de ausencia
con la ría noctámbula a lo lejos.
Barcos en sombra.


Ana Muela Sopeña

UNA LIBÉLULA

*
Una libélula
me mira desde el fondo del silencio,
en el crepúsculo.


Ana Muela Sopeña

CAMINOS BIFURCADOS

*
I
Nostalgia de la piel de la palabra,
entre la luz de un mundo subterráneo,
susurrando belleza sin relojes.

II
Sabiduría arcana en el espacio
de una sombra en caminos extraviados
en estatuas de sal.

III
Fertilidad de océanos
en los cuerpos sonámbulos
que en la ebriedad del caos
se alejan respirando sin las máscaras.

IV
El poder no consigue ser de agua,
escapa de la herida
y se instala en subsuelos sin las claves.

V
Amanece en paisajes
donde la vibración de las palabras
se detiene en océanos de niebla.

VI
Humo en la bruma,
en pétalos de sueños y de hojas
que se estremecen sólo con el viento.

VII
Un camino hacia el punto del amor
me permite seguir en desnudez.

VIII
Las sílabas de todos los poetas
me contemplan en noches de humedad,
con pájaros nocturnos
y lluvia silenciosa
que dormita en aceras suavemente.

IX
El sonido de la ola
cuando rompe en lo oscuro,
en los acantilados de los lobos,
me adentra en el misterio de los púlsares.

X
Arena en caracolas de orfandad,
para soñar contigo, sin el muro.

XI
Tus letras se deslizan por mis arcos
de enigmas escondidos en la tierra.

XII
Vocales, consonantes y diptongos
en medio del sendero primigenio.
Iniciación sagrada, numinosa.

XIII
Caminos bifurcados en la niebla
para salir del pánico,
con los ojos abiertos al azar.

XIV
Un camino de estrellas,
heptasílabos
que llevan hacia reinos infinitos.

XV
Otra vía diabólica,
en la depredación más absoluta
disfrazada de lúbricos instantes.

XVI
Y la ruta de la alquimia impregnada de cuásares,
donde viven sin tiempo
las prímulas que aspiran a ser mónadas.


Ana Muela Sopeña

viernes, 23 de octubre de 2009


EN EL LUGAR SECRETO

*
Una luz
imperceptible y ciega
me llegó de tu alma.

Entonces encendiste
la llama de la infancia en tu escondite,
en el lugar secreto de tus horas.

De pronto pasó algo,
el radar se rompió
o quizás fue otra cosa...

La transmisión se fue perdiendo,
el humo de la sed se fue apagando.

Ahora sólo nos queda
esa contemplación muda y distante
desde el mundo del alba,

en
el
recuerdo
errante
de lo que un día fue...


Ana Muela Sopeña

ESE MIEDO A VIVIR

*
Ese miedo a vivir es muy antiguo,
cuando la voz del agua persiguió
mezclar todas sus noches con lo sórdido.

No deseó ser número en el lodo,
eligió ser el fuego prometeico
a través de palabras encendidas.

Ese terror atávico es un lazo
con la letra candente y lujuriosa
que se abisma en umbrales de su herida.

Hay mundos esperando...

Todo lo que no vive un ser de sílabas
se confabula
siempre,
para dejarlo solo en el camino.


Ana Muela Sopeña

MI CUEVA ES TU REFUGIO

*
Las dudas no me dejan respirar,
me someten a exilios de la sangre
en vagones oscuros.

Una fosa de miedo subterráneo
sobre la sal del alba,
en el numen de un árbol de silencio
me desliza entre tus párpados.

La herida de tu mundo
me permite ver fotos color sepia,
como alondras de agua.

Mi cueva es tu refugio, donde mi piel te roza
con luz de los crepúsculos secretos.


Ana Muela Sopeña

jueves, 22 de octubre de 2009


MEMORIA VACÍA

*
Después de aquella imagen
todas las ilusiones se esfumaron.

La memoría vacía
se convirtió en relámpago de fuego,
para asumir el tiempo
desterrando lo utópico.

Y de pronto un fulgor
de libertad creciente
ascendió por la médula
y estalló en el cerebro
como una luz azul fuera del mundo.


Ana Muela Sopeña

ENSIMISMADA

*
Una ciudad vacía
me espera cuando salgo a caminar.

El frío del otoño me lleva por lugares imposibles,
donde sólo tu imagen se hace nítida
y me permite estar
ensimismada.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 21 de octubre de 2009


HOLOGRAMA DE SILICIO

*
La ciudad era un cúmulo
de sombras adheridas a las calles.
La gente no miraba
a los ojos de nadie,
tan sólo respiraba imperceptiblemente.

El frío se adueñó de las mujeres
que en sus barcas de sal,
con lágrimas de seda,
esperaban la mano protectora.

La abulia esclavizó a todos los hombres.
Reptaban por los parques,
como boas hambrientas y ateridas,
buscando el pulso cósmico
de las hembras sin tiempo
que habitaban los bosques del asfalto.

Una luz cegadora
sorprendió a las mujeres
y sus relojes biónicos
se pusieron en marcha.

En el abismo suave del crepúsculo
una mujer antigua
sedujo a los androides de la mátrix
con su holograma de silicio.


Ana Muela Sopeña

martes, 20 de octubre de 2009


UNA PALABRA

*
Una palabra
es
un reino oculto.
En ella
la
mirada del amor,
los códigos
de guerra
y
genocidio,
firmas
del
armisticio,
la despedida
triste
y melancólica,
el apoyo fraterno
de un
amigo.
Una palabra
es
un mundo de pasión y de belleza
o muerte
silenciada
por los pórticos.


Ana Muela Sopeña

MELANCOLÍA ENTRE LA ARENA

*
El desierto es el limbo
de los desesperados.

Las dunas intocables
se entregan como flores en invierno.

La travesía es siempre muy difícil.

Insaciable la sed.

El desierto reclama
atormentados
hijos de la luna,
para
su
canto
triste.

Melancolía entre la arena,
cuando mueren los sueños
en espejismos de la noche.


Ana Muela Sopeña

ESPACIOS CÓNCAVOS DEL MITO

*
.....Una larva de fuego se transforma en crisálida plena de silencio. Cuando el otoño llega con su luz está la rosa etérea acechando en el sueño. Un humano del bosque encuentra mariposas en los lagos. El instante detiene los relojes de los espacios cóncavos del mito.
*
*
Ana Muela Sopeña

HACIA UN SOL LÚDICO

*
A mi amigo y gran poeta Miguel Íñiguez

La lucha no termina en el otoño,
es un tiempo de cambios.

Azar dentro del nudo,
huérfanos de la herida,
renacimiento y luz hacia un sol lúdico.


Ana Muela Sopeña

lunes, 19 de octubre de 2009


NIEVE EN LA ROSA

*
Luz entre niebla,
sobre piel del exilio.
Nieve en la rosa.


Ana Muela Sopeña

SIETE HAIKUS DE PÁJAROS

*
Una gaviota,
un crepúsculo de agua.
Meditación.

*

El ruiseñor
en su rama de sueño.
Dulces visiones.

*

Mirlos de otoño
en jardines secretos.
Música de aire.

*

Un petirrojo
en el árbol del mundo.
Desolación.

*

Miro una imagen.
Un gorrión pequeñito
en el alféizar.

*

Vuelan vencejos
en la tarde del norte.
Playa de luna.

*

Pétalos blancos,
a lo lejos un búho.
Sublimación.


Ana Muela Sopeña

domingo, 18 de octubre de 2009


ORFANDAD EN LAS ACERAS

*
El territorio de la rosa
permite en acrobacias los extremos.

Por toboganes de silencio
mi vientre es en la noche
un animal de agua.

Tu luz ha ido a esconderse
al fondo del abismo, con las cuerdas.
En la sombra del hielo
una aguja señala un callejón.

Las rocas invisibles de tu herida
se mezclan con mi voz de las edades
y sonidos que vienen de otro tiempo.

Un desierto de sílabas
abraza mi orfandad en las aceras.


Ana Muela Sopeña

RETORNO DE LAS CALLES DEL ESPEJO

*
Retorno de las calles del espejo
donde la sombra blanca se divierte con mi temor.

Inauguro una plaza de silencio
para vestir las horas de los libros en sus umbrales.

Sabiendo
de la imposibilidad de completud
me retiro a la aurora
por las aceras suaves del relámpago.

Imagino una letra
que fulgurante se abre
entre camiones de mudanzas.

Y luego visualizo muchas sílabas
que avanzan sin tregua
por los vórtices de los siglos.

Me entregas las vocales bajo tu piel helada,
yo busco consonantes
que aceptan
los códigos
antiguos
y escondidos
tras las ventanas...

Oculto el Aleph,
entre visillos rancios de un pueblo en despedida.

Vislumbro a Zaniah
brillando entre la niebla de tu ciudad apátrida.


Ana Muela Sopeña

*****

Zaniah: Estrella de la constelación de Virgo

PÁRPADOS DEL AGUA

*
I
Mi piel de las galaxias
baila en la supernova de tu herida.
*
*
II
Los párpados del agua
se deslizan a cuásares de fuego.
*
*
III
Tus dedos consagrados a la diosa
afianzan estrellas en mi vientre.
*
*
IV
Los ojos del espacio sideral
alcanzan asteroides
y con pupilas llenas del asombro
se recrean en púlsares de ónix.
*
*
V
Los cuerpos invisibles,
con éxtasis de lunas,
se abrazan con latidos del crepúsculo.
*
*
Ana Muela Sopeña

GUARIDA DE HIELO

*
Aquel hombre enhebraba
los hilos de la muerte,
para soñar crepúsculos
en medio de los duendes.

Su guarida de hielo
se llenaba de lava,
cada vez que la noche
traía una palabra.

Al saber de su pánico
envuelto entre la seda,
intentó estar oculto
a caballo en la niebla.

Un día del otoño,
sabiendo que los mundos
crecían invisibles
con árboles y búhos,
detectó entre las cuevas
las sílabas del humo,
vislumbrando despierto
la belleza de un junco.

Aquel hombre tan solo
descubrió que la bruma
era sólo una luz
en medio de su ruta
y procuró mirar
más allá de la oculta
enredadera negra,
oscura en sus dos grutas.


Ana Muela Sopeña

viernes, 16 de octubre de 2009


EL HOMBRE DEL ABISMO

*
El hombre del abismo
se precipita siempre
en la oscuridad más absoluta.

Intenta componer el universo
con sus manos de nácar,
pero pronto un fractal de caos y lodo
aparece en sus ojos de la sombra.

A veces un instante entre las piedras
le permite soñar con la gran luz,
pero un reflejo entre los charcos
lo lleva por caminos de locura.

El hombre del sol negro
atrapa en fosas
de silencio
jeroglíficos crípticos de arena,
para volar de nuevo como Ícaro.

Mas todos sus inicios son en vano,
se derrumba entre ruinas
casi ciego
y regresa hacia nidos
en cavernas,

con matrices oscuras,
deshabitando tiempos casi mágicos,
por no mirar de frente lo real.


Ana Muela Sopeña

LA MUJER DE LA NOCHE

*
Vagaba por galaxias interiores
en la piel del espejo,
adivinaba el mundo
en sus dos manos,
pretendía escuchar
los sonidos del agua.

Filtraba los desiertos en su vientre
y sollozaba siempre en el silencio.

La mujer de la noche era de plata,
de algas y de espuma del océano,
se unía con las lluvias del marasmo
de la vida en los hielos.

Deambulaba por ríos y barrancos,
como holograma incierto de nostalgia.

Se adhería a los vientos espectrales,
en precipicios de misterio.

Ululaba con búhos en los árboles
y entregaba al espacio sus secretos.


Ana Muela Sopeña

ME DESNUDARÉ

*
Sólo me desnudaré cuando el crepúsculo
haya agotado las horas
de mis insomnios.

Y soltaré mi ropa en un barranco,
me bañaré en un río de azurita
y un pájaro de sueño será mío.


Ana Muela Sopeña