miércoles, 6 de enero de 2010

LAS PALABRAS CABALGABAN

*
Las palabras cabalgaban
en los surcos de los sueños,
como si fueran caballos
en el delirio del tiempo.
Rozaban tu piel azul
y soñaban con el viento,
seducían a las nubes
y se amaban tras los velos.
Las palabras dormitaban
bajo sábanas de espejos,
para perseguir alondras
escondidas entre hielo.

Murmuraban sus salmodias
en el temblor de la noche
y besaban la belleza
sobre los muros de adobe.
Las palabras eran cómplices
de los árboles del orbe
y susurraban secretos
bajo la sombra de un broche.
Encendían una luz
en la rosa de las voces.
Mientras, tocaban el cielo
y contemplaban visiones.


Ana Muela Sopeña

2 comentarios:

María BlancaNieves dijo...

Qué versos Ana, debería decir Hada porque sencillamente tu poesía, una hermosa magia que atrae.

¡¡¡Bellísimas imágenes!!!

Te quiero mucho y te admiro tanto.
Mi abrazo con cariño.

Ana Muela Sopeña dijo...

María, me agrada que este romance onírico te haya gustado.

Un besito hasta tu México querido
Ana