*
He navegado en barcos de cenizas
a través de lugares imposibles,
para llegar al centro de la vida
en la arena insalvable.
Las luces de la noche me recuerdan
que todo son teatros dirigidos
por las almas cautivas
que se esconden sin miedo en precipicios vacuos.
Ahora sólo puedo mirar lánguida
la ciudad con su sombra
que me inspira sin tiempo
en un acantilado, con la lluvia.
Ana Muela Sopeña
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4 comentarios:
Muy buen poema.
Tiene mycha musicalidad y una metáforas muy logradas, como el 1º verso que es excelente.
Un saludo.
Excelente como siempre, Ana.
Un abracico.
Gracias, José Antonio, me alegra mucho que te haya gustado.
Un abrazo
Ana
Perfecto, gracias por pasar y dejar tu huella.
Un abrazo grande
Ana
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