martes, 21 de septiembre de 2010

LUZ EN LA HOJARASCA

*
A Marina Centeno, gran poeta y amiga

Descubres esa luz en la hojarasca,
para tu canto triste del crepúsculo.

Oleajes de un mundo
en descomposición y metamórfosis.

El cambio en la distancia del océano
sumergido en palabras de nostalgia.

La sombra en las jornadas de la luna
se refugia en presagios de la tierra.

Aterida en los campos de la escarcha
inicias el camino de las sílabas,
bajo el manto de una diosa pélvica
que sabe del amor y de la muerte.

En soledad perpetua
la creación continua te acompaña,
a pesar del susurro de la noche
y de la piel amada del instinto.

Una esfera de nieve es el preludio
de un reino que te inunda en la penumbra,
con el ritmo del verso
de los márgenes
y la métrica interna
del deseo.


Ana Muela Sopeña

4 comentarios:

Marina Centeno dijo...

Querida Ana, amiga:

Es un honor y placer estar entre tus versos. Sí, tus versos pulcros y luminosos...
Tú que conoces de mí la tesón y la perseverancia en esta soledad donde de aprovecho cada rincón oscuro y cada nostalgia que me abraza...
Muchas gracias, amiga mía, por tu permanencia, por tu comprensión hacia lo mío, por tu cálida mano y tu palabra fraterna.

Un beso infinito.

Marina Centeno.

Ana Muela Sopeña dijo...

Me encanta, Marina, que el poema te haya gustado.

Eres poeta buscadora de nuevas formas, lo sé.

Con mi admiración y afecto
Un abrazo
Ana

Marina Centeno dijo...

Me encanta y me honra, Amiga. Es un privilegio estar entre tus versos.
Saludos.

Ana Muela Sopeña dijo...

También para mí, tenerte como amiga.

Besos de luz
Ana