*
Regresa
a la infancia del sueño
que abandonaste pronto aquellos años
dominados por dudas
y soledad de mundos infinitos.
Retorna
al instante primero,
cuando la lluvia era tu consorte
y mirabas las piedras sin temor.
Lagartijas en fuentes
y ranas en estanques con nenúfares.
El sonido del agua puede ser
el aviso de todo.
Vuelve
a una niñez de reinos intangibles
con elfos y con gnomos
ataviados con prendas de romero,
para endulzarte el día con su magia.
Ahora
es el instante pleno,
para desarrollar esa intuición
que te lleve por troncos y mandrágoras
adueñadas de ti
y
tu desconcierto.
Ana Muela Sopeña
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4 comentarios:
Mientras se pueda volver al niño interior tenemos salvación....
Muy descriptiva y freca Ana. Un abrazo
Hola Ana!!
¡Qué bonito sería ese mundo de niños de nuevo,con gnomos y elfos!
Soñar..con volver a la niñez,gracias Ana!
Un beso
Gracias, Esencia.
Me gusta verte entre mis letras.
Un beso
Ana
Gracias a ti, Estrella.
Un beso grande
Ana
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