*
Amor,
no te hundas en la sombra,
yo te espero cautiva
en la luz del momento primigenio.
Amor,
no sufras con visiones que no existen,
tú sabes que mi piel es sólo tuya.
Amor,
aguardo tu voz íntima,
sólo para escucharte que estás bien.
Ana Muela Sopeña
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2 comentarios:
Me ha gustado mucho, Ana. Es un poema directo, sencillo, pero lleno de emociones. La espera, el temor,
Breve y radical en su sencillez.
Muy bueno.
Besos.
Gracias, Juan.
Siempre es alegre tu paso por mi blog, compañero poeta.
Un abrazo
Ana
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