sábado, 11 de diciembre de 2010

COMO UN RITUAL DE DIOSES SUMERGIDOS

*
A una trabajadora del amor cualquiera

Como un ritual de dioses sumergidos
en la noche callada
te entregas al canal de las mareas,
para sobrevivir entre las rocas.

Los náufragos beben de tu mundo
y alcanzan esa meta de los sueños
donde el todo diluye el gran terror.

No es sólo un roce efímero de cuerpos
lo que buscan erráticos en ti,
es saberse aceptados para siempre
en el instante único del éxtasis.


Ana Muela Sopeña

2 comentarios:

Unknown dijo...

Qué preciosidad de poema, Ana. Tocas un tema como éste desde un punto de vista diferente, y ya desde el título hasta el último verso no tiene desperdicio.

Muy bueno.

Abrazos.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Juan. Me alegra muchísimo que este poema te haya gustado.

Creo que es un poema delicado y sólo he deseado tocar esa aceptación incondicional que estas mujeres trabajadoras proporcionan. Algo importante y delicado.

Un abrazo
Ana