lunes, 28 de febrero de 2011


SIGO SOÑANDO

*
Es difícil soñar
cuando todo se muestra tan difícil
en esta realidad adulterada.

Pero sigo soñando
para que las palabras me custodien
en este mundo hostil
donde hace frío.


Ana Muela Sopeña

ESPERANDO QUE YO SEA TU ALIADA

*
.....A veces te recuerdo muy difuso entre las calles húmedas de la ciudad sin tiempo y sin espacio. Caminas suavemente y te mezclas con rostros imantados por la nostalgia apátrida y silente. Otras veces te veo guarecido en los portales ebrios de caricias. Esperando que yo sea tu aliada en este mundo sórdido y absurdo. A veces visualizas de mi ser los nítidos contornos de mi silueta errante. Otras veces recreas en tu mente etéreas sensaciones de irrealidad extraña. Todo va diluyendo su materia a través del instinto subterráneo que nos lleva por rampas y por plazas hacia el punto aquietado y primigenio de un pasado borroso.
*
*
Ana Muela Sopeña

MAGIA SIN HORAS

*
I

Una mirada
cuando irrumpe la luz.
Magia sin horas.


II

Hojas, columpios
en la tarde de invierno.
Bruma en el aire.


III

En el crepúsculo
un naufragio de sombras.
Tú me recuerdas.


IV

Noche convexa,
en el túnel la herida.
Yo soy tu espejo.


Ana Muela Sopeña

domingo, 27 de febrero de 2011


PRESAGIOS DE LA NOCHE

*
I

He visto los presagios de la noche
en tu rostro marcado por el tiempo.


II

La nostalgia me lleva por espacios
donde un cansancio de violetas
me dirige al lugar de los recuerdos.


III

Una radio lejana
irrumpe con su música
en mi mundo de olvidos.


IV

El frío de la tarde melancólica
se abre entre los signos caligráficos
al tiempo de los astros.


V

Geometría del viento en tu mirada
cuando atrapas el sueño de mi piel
y deslizas tus iris por mi cuerpo.


Ana Muela Sopeña

BAJO LA LLUVIA

*
Febrero va esfumándose
bajo la lluvia fina de las calles.

Los días se hacen largos poco a poco.

La primavera asoma en las pupilas
de la gente que va lidiando el mundo.

Un átomo de fuego me recorre
y me pide que asuma cada día
con la pasión eterna de los árboles
o la distancia abierta de una flor.

El espacio desliza sus enigmas
en medio de la niebla del invierno.

Las horas van pasando
y pronuncio tu nombre...


Ana Muela Sopeña

RETOS

*
Habitar en una casa donde anide la alegría.

Abrirnos a un mundo fértil
que nos permita crear.

Buscar
aliados
que
quieran
que
seamos
más
felices.

Relacionarnos sin miedo
con personas luminosas.

Levantarnos de la cama con la pasión en los ojos.


Ana Muela Sopeña

TIEMPO SIN SOMBRAS

*
La
llovizna
caía
suavemente
y

me
contemplabas
en
un
tiempo
sin
sombras.


Ana Muela Sopeña

sábado, 26 de febrero de 2011


HACIA EL VACÍO

*
Una luciérnaga
olvidando la noche
hacia el vacío.


Ana Muela Sopeña

CUANDO SÓLO EXISTÍAN LOS TELÉFONOS FIJOS

*
Las palabras no pueden trastocar
el orden imperante de las cosas.

Tus palabras me llegan como agujas
que rompen nuestro nido.

Mis palabras deslizan una luz
en el mutismo de la noche.

No entiendo las palabras que me hieren
cuando sólo he entregado protección.

No entiendes el silencio del azar
porque todo es confuso con los móviles.

Todo era más sencillo
cuando sólo existían los teléfonos fijos.


Ana Muela Sopeña

viernes, 25 de febrero de 2011

jueves, 24 de febrero de 2011


SONRÍO

*
El ojo que has pintado en el papel
ha sido una visión de terciopelo.

Me he sentido flotando por las nubes,
inmersa en una pompa de jabón,
volando por el cielo con cometas
abiertas a un destino indescifrable.

La frase que has escrito no es real
porque no es el futuro lo que importa
sino el tiempo presente.

A veces me pregunto si los símbolos
nos sostienen en este mundo sórdido,
para que podamos soportar
lo terrible de una vida sin sentido.

Cuando miro tus ojos
veo un significado en estar viva
y sonrío por ser tu libertad.


Ana Muela Sopeña

EN RELÁMPAGOS

*
Me doblo en los espejos
y camino hacia un mundo de penumbra
donde la luz del alba se renueva en relámpagos.


Ana Muela Sopeña

BAJO MI PIEL

*
Amor mío,
desnúdame al alba,
para sentir tu cuerpo
bajo mi piel de luna.


Ana Muela Sopeña

QUISIERA

*
Una ciudad que sueñe
en el hechizo
mientras la gente va creando vida.


Ana Muela Sopeña

EL VIGILANTE

*
El vigilante
observa mis pasos
en la prisión de acero.

No escucha mis plegarias
en la noche de sombras.

El vigilante
no me mira con ojos ni descubre mi alma.

Censura mis caminos
que danzan en la luna.

Pero esta noche ha muerto
el vigilante antiguo
que medía mis huellas en silencio.

Y me elevo por rutas y por plazas
hacia otros territorios
donde el sueño es visión de la utopía.


Ana Muela Sopeña

martes, 22 de febrero de 2011


ABISMO ROTO

*
La noche se llevó el abismo roto
al que tú me arrojaste sin palabras.


Ana Muela Sopeña

TRAVIESAS

*
Las nubes me contemplan
desde sus velos blancos
y me buscan traviesas
en medio de las horas.


Ana Muela Sopeña

CAMINOS DEL AGUA

*
Los caminos del agua van cruzándose
en mi vida desgarrada.

Una rosa de fuego me recibe
en un mundo ya muerto.

Me cuesta respirar,
las calles no me amparan.

Las raíces me enredan en los árboles,
los transeúntes pasan y no miran.

Me voy quedando atrás
el tiempo avanza

un espacio de sombra me posee.


Ana Muela Sopeña

NACE EL POEMA

*
.....Las palabras se aman, se besan, arden entre sí, se tensan, se relajan. Batallan y danzan en la noche interminable. Así nace el poema.
*
*
Ana Muela Sopeña

lunes, 21 de febrero de 2011


EN LA NOCHE INTERMINABLE

*
Nos vemos en la noche interminable
y me llevas por mundos
donde las sombras tenues de las plazas
se mezclan con lo sórdido
de hogares
sumidos en momentos de orfandad.

Nos persigue la lluvia en su secreto
y abrazamos el pánico en portales
envueltos en los nombres y murmullos
de las horas dormidas en la niebla.

Un ladrido de un perro
nos graba en la memoria
la soledad que habita en las aceras.

Permitimos que todos los relojes
se consagren al viento de los años
donde un púlsar de luz nos transfigura.


Ana Muela Sopeña

POR TIERRAS DE PENUMBRA

*
Tus ojos me cautivan en la noche
y me llevan por tierras de penumbra
a lugares con tenue luz de luna
donde te vuelves luz mientras te escondes.

Mi piel te hace partícipe del nombre
que se oculta en los ecos de la lluvia
inmersa entre los átomos de bruma,
como presagio azul de sombra y bosque.

Un sortilegio suave me recuerda
tus pupilas amadas de la infancia
envueltas en secretos sin memoria.

Tu conjuro me habita entre la niebla
en la caligrafía de palabras
abiertas al fulgor de las auroras.


Ana Muela Sopeña

NUBE DE SOMBRAS

*
Nube de sombras
en presagios de arena.
Contemplación.


Ana Muela Sopeña

domingo, 20 de febrero de 2011


EL INVIERNO DE LA VIDA

*
A mi madre que hoy cumple 85 años

Has llegado al invierno de la vida,
allí donde el espíritu se aquieta
y deja atrás caprichos de veleta
en los años de nieve ya perdida.

Entretejes con luz la dulce brida
que te permite aún ser una esteta
y manejar sin sombra una cometa,
para que ascienda lejos de la herida.

La belleza del agua te hace ser
meditación del mar bajo la rosa,
abocada a la espuma de la tarde.

Mirando atrás intentas resolver
los secretos en trama silenciosa
de una visión pasada que aún arde.


Ana Muela Sopeña

ESPACIOS NOCTURNOS

*
I

La raíz de las cosas
me mira respirando en lo invisible.


II

Una sombra sagrada
se esconde con la noche en la belleza.


III

Adherida al instinto
la rosa de la luz se sabe mía.


IV

He venido con niebla a protegerte,
para que no te quedes solo y frío.


V

Un árbol entre pájaros de lluvia
se ampara en el paisaje de los sueños.


VI

Agradezco al momento primigenio
sentir otra visión de la galaxia.

VII

Un naufragio de espacios
me invita a constatar
que estoy sufriendo.


VIII

La luna se recoge en su caverna
mientras el tiempo pasa inexorable.


IX

En la estación he visto tu reflejo
caminar hacia mundos imposibles.

X

Me has dejado de ver en las imágenes.
Un minuto de ti es un dulce rápido.


Ana Muela Sopeña

ROSA EN LA PENUMBRA

*
A Rosa Iglesias

Tú vienes de la rosa en la penumbra
a descubrir un cáliz sobre el hielo
y adorar un espacio entre los vientos,
sabiendo que la luz se vuelve luna.

Tú vienes de los lirios en la bruma
que habitan en el aire del momento
enredados en pétalos, con ecos,
sostenidos por horas de locura.

Y procuras ahondar en la belleza
que reside en el agua de visiones,
en olmos seducidos por las ninfas.

Así vas sumergiéndote en la Tierra
mientras el mundo azul contempla a un hombre
atrapado en ausencias infinitas.


Ana Muela Sopeña

TREN

*
El tren de los paisajes invisibles
me visita en los sueños.


Ana Muela Sopeña

INSTINTO Y CÁLIZ

*
Te siento cálido
en las noches de bruma.
Instinto y cáliz.


Ana Muela Sopeña

LOCURA DE LA NOCHE

*
En los huesos habitan los mundos escondidos
e imágenes perdidas de la luna.

Los pulsos interiores
se deslizan por dioses de penumbra
al alba,
con las rosas.

Un embrujo que sabe de memorias
enamora al cristal
de las auroras
en naufragios desiertos.

El reloj estelar de las edades
sintoniza con lluvia
que se aleja del pánico a la bruma.

Las gotas de belleza
inspiran la locura de la noche.


Ana Muela Sopeña

sábado, 19 de febrero de 2011


MISTERIO Y MÚSICA

*
A Valentina Igoshina

La melodía suena
en el centro de un mundo incandescente,
mientras el sueño etéreo
desgrana en lo abisal símbolos de oro.

Se deslizan tus dedos por el piano
en espacios que saben de la luz
y buscan la belleza de los pétalos.

Un mito de pasiones adheridas
a la niebla enredada en el asfalto
desarrolla la noche sin temor.

Misterio y música
deslizando la sombra imperceptible
por las teclas de lágrimas
invisibles en círculos de arena.


Ana Muela Sopeña


*****

Valentina Igoshina es una joven pianista rusa que nació en 1978. Su manera de interpretar es sublime.

AMARRADA

*
Amarrada a tu vibración de loto
te veo entretejido con el agua.

Mis versos
se hacen eco de tu voz
en océanos mudos.

Un pájaro de niebla en la nostalgia
nos mira respirando con sus alas
y nos invita siempre al vuelo alegre.

Imantado por mi piel crepuscular
me llevas en tu alma de penumbra
y en el sueño me dictas tus deseos...


Ana Muela Sopeña

TE VEO EN TU GUARIDA

*
Te veo en tu guarida
inundado por nubes muy dispersas.

La tristeza te lleva por raíces
de mundos amparados en la niebla.

Te tiendo mi mano en la distancia,
te ayudo a atravesar todo lo extraño
con una luz prendida del crepúsculo.


Ana Muela Sopeña

viernes, 18 de febrero de 2011

NOCHE DEL HUMO

*
Me miraste con ojos de peligro
en la noche del humo.

Muy cerca pabellones industriales
desafiando al tiempo
con su mutismo sórdido.

El ruido de los coches
nos trasladó a la hora de los sueños.

El frío nos calaba hasta los huesos,
pero pronto pudimos arroparnos.

Nada hablaba de ti bajo la luna,
nada hablaba de mí sobre el asfalto.

Un bosque de palabras embrujadas
nos deslizó por círculos de olvido
al universo etéreo del enigma.

Tu abrazo sólo hizo
sellar nuestro secreto.

El instinto del agua nos guardó
el nombre de la lluvia en la guantera.


Ana Muela Sopeña

EN LA HORA MÁGICA

*
Cada vez que te veo
el asombro nos sale a recibir.
Nos besamos sin hablar un largo rato
hasta que alguno dice algo
e interrumpe el silencio.

Un claxon a lo lejos
nos habla de una vida verdadera,
pero nosotros
tan sólo nos miramos
con el reloj detenido en la hora mágica.


Ana Muela Sopeña

NOS PREGUNTAMOS

*
Nos preguntamos siempre
si esto o lo otro durará,
pero eso no es lo importante.

Lo que importa de verdad
es apostar por cada instante del presente
como si fuera el tren último
de nuestro incierto destino.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 16 de febrero de 2011


PERO VIENE EL AZAR

*
A veces el insomnio no nos deja
otra opción que una piedra sin sentido,
el cansancio del polvo en los zapatos,
la soledad de un suelo sin salida
donde el alma subyace en una cárcel.

Pero viene el azar a liberarnos
y nos da la apertura necesaria,
nos abre la memoria hacia lo nuevo
y de pronto la vida
fluye en río.


Ana Muela Sopeña

SORTILEGIO DE LLUVIA

*
A veces siento el tiempo como horas vacías
y pretendo arrullarme en el olvido.

Contemplo los fantasmas que me alejan de ti.

El azar ha querido que seamos un fuego.

Se quiebran mis heridas
cuando llegas sonriente
y una savia de arce me acerca hacia lo fértil.

Me refugio en tu alma
con mi vientre de musgo.

Un sortilegio
de lluvia en la nostalgia
me hace ser tu camino.


Ana Muela Sopeña

PÁJAROS DE EXILIO

*
Caminamos despacio
con las nubes mirando nuestro intento
de adivinar la luz en noches ávidas.

Buscamos el instante de la niebla,
más allá de las sombras de los árboles.

Yo persigo a los pájaros de exilio
para resucitar con las mareas.

Tú persigues crepúsculos sin nombre
para recuperar tu esencia antigua.


Ana Muela Sopeña

NUESTRO ADN

*
Nuestro adn busca
las sílabas sagradas
para retornar a las estrellas.


Ana Muela Sopeña


VERBOS PRIMIGENIOS

*
A Pere Bessó, aliado en la palabra
Feliz cumpleaños, amigo

Las palabras conforman la galaxia
con metáforas híbridas de arena,
en mundos que se abren al intento
y latidos aliados
de los sueños.

Tus versos se deslizan
en imágenes
con pulsos de belleza subterránea.

Los verbos primigenios te hacen hijo
de la luna que canta en su guarida
y las sílabas van danzando
solas
hasta introducirse en el umbral.


Ana Muela Sopeña

martes, 15 de febrero de 2011


BRISA

*
La suave brisa
de belleza oceánica
es mi refugio.


Ana Muela Sopeña

LAS HORAS

*
6.00 El alba

Despuntan rayos áureos en el mar
y de nuevo comienza el día ebrio
que cabalga sin norte hacia lo ínfimo.


8.00 Comienza el día

El motor del instinto vuelve a andar,
la luz nos hace ser, aunque nos duela.


9.00 Inicio de jornada

Llueven los sentimientos de ser alguien
mientras el tiempo pasa inexorable.


12.00 El Ángelus

Las campanas nos señalan
que hay un ángel de luz en cada hora.


14.00 El mediodía

El mediodía nos recuerda
que la existencia es sólo ritmo y agua.


20.00 El crepúsculo

Va cayendo la tarde
en la melancolía de los seres
y de pronto un segundo trae el fuego
de los dioses que juegan a ser hombres.


22.00 La noche

La penumbra nos lleva por lugares
donde la soledad nos hace humanos.


1.00 El sueño

Atávicos los sueños nos inspiran,
en la visión de sombra,
los ocultos rincones de la noche.


4.00 La hora mágica

Los espíritus andan en la niebla
y nos susurran al oído
que la vida es teatro, nada más.


Ana Muela Sopeña

LUNA BLANCA

*
La luna blanca
se columpia en mi piel
y tú me miras.


Ana Muela Sopeña

DUBROVNIK

*
El sol inunda calles y horizontes
y los niños embrujan la ciudad
al ritmo lento de las horas.

Una nostalgia de futuro
permite que las piedras
se adueñen del reloj en las ventanas.

La emoción se columpia en los cafés
que realizan el rito
de la amistad anclada
en la espiral de la historia.

La noche imperturbable
se acerca hacia la oscura infinitud,
mientras la tristeza se suicida
entre los soñadores del umbral.


Ana Muela Sopeña

TU CIUDAD

*
Tiempo de luz
cuando tú me susurras.
Soy tu ciudad.


Ana Muela Sopeña

LA CASA VACÍA

*
La casa permanece
vacía con la bruma de la tarde.

Allí la vida clama
por ser una intención hacia otro espacio,
pero
no
pasa
nada.

La soledad se ha afincado
en pasillos y armarios.

Los objetos retienen los instantes
que antaño fueron cuerdas,
punzadas del destino.

Ahora ya no están esas vivencias
y va muriendo el polvo
en el reloj de la nostalgia.

La casa permanece
sin latidos, ni flores, ni recuerdos,

tan sólo los olvidos necesarios
permiten que el salón
simule ser el fuego del hogar.

Y se van las imágenes
por un desfiladero,
se precipitan firmes
por los acantilados
del punto ciego...

La casa permanece
vacía como un túnel sin sentido
y la noche conjura
al alba
en sus intentos de ser luz.


Ana Muela Sopeña

UN HOMBRE SOLO

*
Un hombre solo
atraviesa las calles del temor,
para consagrarse al horizonte.

Consigue ser de fuego
e incendiar
la nostalgia con sus ojos
que respiran la luz en las pupilas.

Se duerme con el agua
en la melancolía de las horas.

Abraza pensamientos de lujuria
para no estar sin tierra.
Necesita enraízar su propio cuerpo
en el cuerpo de Gaia
a través de mujeres,
en la anomia perfecta, arcaica y lúdica.

Un hombre solo
se conecta al radar de la lascivia
para que las matrices de lo fértil
lo lleven por la senda creadora,
más allá de la herida.

Un hombre solo
transmuta los instintos en pasión,
se sumerge en cavernas
de creación continua.

Se transforma en artista,
más allá de lo ínfimo
que quiere reclutarlo como una subespecie,
y desliza su centro de energía
al corazón del mundo
que es su propio corazón.


Ana Muela Sopeña

OCULTOS EN LA NIEBLA

*
Ocultos en la niebla con el aire tan frío,
nos hemos encontrado en la ternura
de este mes de febrero.

Nuestras manos de lluvia en un sueño de estrellas
arropando la bruma de la tarde
antes del huracán de los periódicos.

Escondidos de todos y de todo
abrazados sin miedo,
has llegado a mi alma de penumbra
he llegado a tu espíritu de lobo.


Ana Muela Sopeña