*
Calima de la tarde
recordándome todas las visiones
que un día me ayudaron a soñar.
Hoy el sueño se ha roto
definitivamente.
Porque yo no navego en la escisión.
Mi cuerpo es mi alma espejo
y mi alma es mi cuerpo en lo invisible.
La soledad es fría,
mas tendré que asumirla
para vivir mi centro más allá de las máscaras...
Ana Muela Sopeña
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
El problema con las máscaras es que de tanto usarlas se convierten en rostros y muchas veces la vida gira en torno a ellas.
Saludos, Ana.
Gracias por tu comentario, Alex.
Un saludo desde España
Ana
Publicar un comentario