martes, 30 de agosto de 2011

EN UN VÓRTICE DE CUÁSARES

*
El vacío se sabe
oculto en la materia de las cosas.

La plenitud abarca el infinito
y toca nuestro espíritu de estrella.

Cuando el todo y la nada
se abrazan en un vórtice de cuásares
nuestra vida renace
y surge un ángel blanco
de las cenizas grises del olvido.


Ana Muela Sopeña

2 comentarios:

Julio Dìaz-Escamilla dijo...

Todo en el todo y la nada, vacío y materia que lo substancia. Ya lo dijiste en otro de tus versos: las sombras arropando la luz.
Preciosismo a granel.
Un abrazo.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, por tu lectura, tan amables...

Un abrazo
Ana