viernes, 30 de septiembre de 2011

OQUEDAD DE LA GRAN SOMBRA

*
A María García Romero

En tus ojos habita la nostalgia del fuego
la piedra de la luz en su refugio
la danza de los líquenes
el centro de memoria de las aguas.

Un demonio te quiere para sí,
por navegar errática, sin rumbo.

Pero no olvides nunca:
tu cuerpo es la oquedad de la gran sombra,
donde viven los ángeles de hierba.


Ana Muela Sopeña

4 comentarios:

merche marín dijo...

Acabo de leerte en el blog de Gabriela Amorós y has sido un descubrimiento tremendo. Escribes con todos los ingredientes que me gustan y estoy encantada de haber pasado a conocerte. Necesito leerte mucho más, así que me hago seguidora tuya, con todo mi cariño.
Un beso, Ana.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Merche. Sí, te había visto por allí. También yo pasaré a visitarte con mucho gusto.

Muchos besos
Ana

María G. Romero. dijo...

Gracias Ana!
Querida mía,cada uno de tus versos son como alas invisibles que me arropan, como una música mágica y telúrica donde me hallo vestida por tu palabra.
Te abrazo y te beso sin distancia.
Te quiero Ana, tú sabeas cuánto.
Contigo:
María

Ana Muela Sopeña dijo...

Querida Amiga, siempre adelante, bailando en las horas de la vida. Que son dos días...

Un beso súper abrazado para ti, María
Ana