miércoles, 9 de noviembre de 2011

CICLO

*
I

SOLEDAD

En medio de la vida y de la muerte
la soledad nos lleva por abismos
donde el secreto pacta
con el silencio extraño de la noche.
A veces hay umbrales
en los que somos siempre
protagonistas de la historia.
Pero también hay grutas que adoptan una imagen
de prisión en lo oculto.

II

AMOR

En el vértigo efímero
de una pasión sin forma ni raíces
se encuentran los enigmas del amor.
Ése que no se nombra ni define,
tan sólo es energía.
Revolución en rutas de belleza
hacia la concreción de la utopía.
Parece que los sueños se hacen nítidos
en visiones alegres.

III

DESAMOR

Cuando el cristal se rompe en trozos de mil sombras
todo va reduciéndose a la herida,
al mutismo que ya no ofrece nada.
Cuatro paredes se hacen asfixiantes
para desarrollar una ilusión
de volar por las nubes.
La energía se estanca en remolinos
que ya jamás se mueven.
Y llegan los reproches de la sangre,
chantajes y sobornos.
Las manipulaciones del demonio
que subyace en la piel.

IV

MUERTE

Y de pronto una muerte nos despierta
al latido ideal de la existencia.
Nos desliza por campos y por vías
donde el instante es lo único que importa.
El desgarro nos une
al universo lúdico
de un huracán desnudo de prejuicios.
El caos nos va acercando a las plegarias,
a la vida sonora y verdadera
que habita en los relojes
del fuego sumergido.

V

RENACIMIENTO

De nuevo comenzamos
desde el cero absoluto
a recorrer la rueda
del eterno retorno...


Ana Muela Sopeña