lunes, 30 de abril de 2012

POR EL DESFILADERO

*
La luz se va cayendo cada noche
por el desfiladero de tu pánico,
donde reside en sombra, agazapado,
un animal de bruma,
envuelto en la neblina de los sueños.

Cada día construyes
con ladrillos de imágenes
la apariencia modelo,
pero en el diccionario de la niebla
los nombres van tomando posiciones,
definiendo sus límites de agua.

Todo se va cayendo cada noche
a pesar del esfuerzo, constante y abnegado,
de unir lo desunido.

Todo va disolviendo
los castillos de arena
con movimientos subrepticios
que habitan en el fondo de tu cuerpo.


Ana Muela Sopeña

LIBERACIÓN

*
Sobre la herida
el camino del beso.
Liberación.


Ana Muela Sopeña

DESTELLO

*
Los ojos de la luna
me miran con su frío sobrehumano
y en mis huesos de cobre
un animal de niebla
me asombra con la luz de sus enigmas.

Un destello en la noche me desnuda
en las sombras amadas de la muerte.

La obsidiana es memoria de otro tiempo,
la huella mineral
en el agua del mundo
que disuelve en la lluvia nuestra piel.


Ana Muela Sopeña

.


Fotografía: Ana Muela Sopeña

NEBLINA

*
Contemplo la neblina de la noche
mientras camino enfundada en mi plumífero
y siento contra el rostro
el viento con la lluvia.

Rememoro imágenes de ti,
de tu cuerpo caliente junto al mío.

Sonrío en la distancia.

Atravieso las horas
en la humedad sinuosa de las calles.

Sobre el suelo los charcos hacen brillos.

Termina el mes de abril
envuelto en un fulgor casi sonámbulo.

Las sombras se detienen
en aceras amigas de la nostalgia suave y solitaria.

El reloj de una iglesia
me sorprende tocando un carillón.

El
tiempo
va
pasando
y retorno deprisa a mis visiones
con sueños que cobijan nuestro intento...


Ana Muela Sopeña

sábado, 28 de abril de 2012

.


 

ENTRE LA LLUVIA FRÍA

*
Una mujer arrastra
la soledad del mundo con sus botas
entre la lluvia fría de un mes del calendario.

Avanza hacia la nada
sobre gotas de luz del pavimento.

Huye despacio de las sombras.

Su paraguas protege de lo infame
en la noche que sabe de penumbras.

La ciudad resquebraja su silencio
mientras la gente corre a los portales
en medio del temor más ancestral.

Una mujer atrapa con sus manos
el instante sutil del infinito.


Ana Muela Sopeña

TEJIDO

*
A Miguel Íñiguez, gran poeta y amigo

La distancia parece ser lo único
que puede ya habitar
en los túneles fríos que cincelan
tu realidad de hielo.

Pero
hay un tejido lleno de vida y creación
aguardando en el centro de tu luz.


Ana Muela Sopeña

TE MIRO COMO A UN SUEÑO

*
Te miro como a un sueño
en la espiral del mundo del abismo,
más allá de mis límites.
Un búho desde el vértigo
me observa respirando entre magnolios
y me induce a jugar con lo infinito.
Un instante de luz nos desdibuja
en medio de la vida y de la muerte,
entre piedras de sombras
y superficies libres
de fisuras,
sin pánico al silencio.


Ana Muela Sopeña

viernes, 27 de abril de 2012


HUBO UN TIEMPO SIN TIEMPO

*
A Rossana Arellano, gran poeta y amiga

El tiempo, amiga,
a veces es un cómplice y otras
es un enemigo.

Un demonio
que nos devora las entrañas
y nos hace sumergirnos en los pozos ocultos
de azufre y de petróleo.

Pero no olvides nunca
que los relojes son inventos,
también los calendarios.

Hubo un tiempo sin tiempo,
en el origen,
al que todos deseamos retornar...

No, no hablo de la muerte.
En vida existe un tiempo no mecánico
que fluye como un río de palabras...


Ana Muela Sopeña

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

EN EL MURO

*
Hay un muro que atrapa
al tronco de un árbol de silencio.
En medio de la sed de efervescencia
se percibe el instante del pasado
como una jaula abierta
a la meditación e incertidumbre.

El tiempo
no deja volar libre,
es una llamarada de memoria
adherida a los pulsos de los sueños.

En el sonambulismo,
sumergido en el mundo material,
el movimiento exacto, matemático,
se ha reducido casi a cero.

Hay en la noche
una pared para los símbolos
que nos llevan a espacios cerrados,
donde el cambio es sinónimo de pánico.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 25 de abril de 2012


DESTINO Y LUZ

*
Dama de verbos,
poesía y palabras.
Destino y luz.


Ana Muela Sopeña

MIS LABIOS

*
Mis labios buscan siempre los límites de ti
para sentir el mar de los deseos
en la piel de la herida melancólica.

Soy la arena que busca las raíces
en tus ojos volcánicos de hielo.

Una ola de luz nos va inundando
mientras las yemas de tus dedos dibujan en mi rostro
la belleza nocturna de las algas.

Tus ojos me deslizan por las grutas
de las zonas desiertas de una playa.

Mis pupilas
esperan de tu sombra
un horizonte lleno de sorpresas,
pero mi cuerpo sabe
que al llegar el crepúsculo te irás...


Ana Muela Sopeña

A TRAVÉS DE LA PENUMBRA

*
A través de la penumbra
avanzan siempre los versos
que se abren paso entre lunas
y resquebrajan el hielo.
A veces en una urna
se disuelve todo el miedo,
producto de la gran suma
de las galaxias del verbo.

En el bosque habita el humo
inundando mi cabello
mientras contemplo a los búhos
y me cubro con un velo.
Sueño que no soy del mundo
y que encuentro tu secreto
en la gruta de lo oscuro,
escondida en otro tiempo.


Ana Muela Sopeña

martes, 24 de abril de 2012


EN LA SOLEDAD DE LA MAZMORRA

*
La mirada sombría se rebela
en la soledad de la mazmorra.

Hay casas que parecen una cárcel
porque nadie se puede mover
en la dirección de sus deseos.

La escucha melancólica se abre
al umbral de la herida
nocturna como un vaso de alabastro.

Hay dormitorios que semejan una celda
donde el castigo
es siempre el mutismo.

El tacto que no palpa la belleza
y se queda en los números de la entidad bancaria
no puede contener su descontento.

Hay sábanas de hielo
en matrimonios fríos
que terminaron hace décadas.

El gusto se llevó todas las moras
y las frambuesas de los meses del inicio.

Hay hoteles de nieve y de granizo
donde los cónyuges pasean
su aislamiento sin nombre.

El olfato murió entre bambalinas
y se hizo cómplice de muros invisibles.

Hay bodas, funerales y bautizos
donde se exhiben las parejas,
para mostrar al mundo que ahí siguen,
pero a nadie consiguen engañar.

Los ojos que contemplan lo real
lo saben y lo ven.
Ya nadie piensa que esos seres están juntos,
tan sólo sus carcasas
se embarcan en acciones compartidas.

Hace años que sus almas habitan sin la sangre,
en la escisión del tiempo,
en la nostalgia...


Ana Muela Sopeña

domingo, 22 de abril de 2012


DESCIENDEN POR LOS PÚLSARES

*
Descienden por los púlsares las manos
atrapadas en túneles de niebla.

Me deslizo despacio
hacia cuásares llenos de silencio.

En la galaxia encuentro
un bálsamo de estrellas
para mi corazón ensangrentado.

Las tormentas se mecen con relámpagos
que habitan en planetas donde hay seres
inmersos en los siglos
de la sabiduría sumergida
en las bibliotecas de la luz.


Ana Muela Sopeña

COMPLOT

*
Tus palabras parecen un complot
real como el petróleo sobre el mar,
intuyendo en mi piel tan sólo el sí.
Se oscurece mi luz con las serpientes
terribles con el paso sin confort.
En las nubes recuerdo siempre un ave
zaherida en el néctar de mi cáliz,
abandonada al mundo con tristeza.


Ana Muela Sopeña

LÁGRIMAS NEGRAS

*
Un muro sobre el sueño
y visiones de labios en mutismo.
Una muñeca llora sobre el mármol
con la sed del abrazo en el eclipse.

La nieve va fundiendo las palabras
en las dimensiones de los púlsares.

Lágrimas negras en clausura,
sobre los verbos de la herida.

En la inutilidad de los encuentros
herejía de besos y soledad eterna.

El
vértigo
más
frío
de
la
tierra.

Sonrisas olvidadas...

La anestesia se lleva la memoria
de un mundo amado que se muere en nuestra piel.


Ana Muela Sopeña

SOY INVISIBLE

*
Soy invisible.
El viento de la mañana
se mece en mi transparencia.


Ana Muela Sopeña

sábado, 21 de abril de 2012

COMO EL ÁCIDO

*
A veces las palabras
queman como el ácido
y la huida hacia el mundo de las sombras
es la única posible alternativa.


Ana Muela Sopeña

LLANTO ETÉREO

*
La ciudad invisible
emerge de las sombras escondidas
y permite sentir el llanto etéreo
oculto entre las nubes de tristeza.
El cuerpo transparente de los sueños
se hace nítido en alas de la noche.
La piel de las crisálidas del mundo
no puede soportar la lluvia fría.
Una lágrima anida en una copa
y muta la tragedia en paraíso.
Los ojos liberados de la luz
anotan en cuadernos sus abismos.


Ana Muela Sopeña

jueves, 19 de abril de 2012

LA FURIA SE REFLEJA

*
La furia se refleja en la rosa de fuego subterránea.
La sal de las estatuas no permite avanzar en el camino
de la esencia del mundo. Los cuerpos se recrean
con los iris amados de lascivia.

Retazos de penumbra, sutiles subterfugios que se esconden
en cartas olvidadas o en viajes tan antiguos como el tiempo.

Precipicios con miles de mujeres que buscan sortilegios ya caducos,
para sentir los ojos de los hombres en sus pupilas suaves.

Sonrisas integradas con la noche en los lagos de seda y terciopelo.

Hay seres que se miran en espejos
sobre los escenarios de las calles,
consiguen sumergirse en utopías, más allá de relojes sin futuro.

En los acantilados de los lobos
hay cazadores listos para el ritual de pieles y de acero.

Parejas destinadas a ser vértigo se cruzan en las horas de la nada.

La gente ya no escucha en sus guaridas
los nombres melancólicos de niebla.

Un desencuentro extraño nos domina
a pesar de las líneas telefónicas,
los e-mails soñadores y los chats de los móviles.

La hostilidad se cierne sobre el párpado
de nieve consagrada a diosas frías.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 18 de abril de 2012

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

LA PLAYA DUERME

*
La playa duerme
en su mundo tejido por el tiempo
más allá de la herida melancólica.
Atraviesa el instinto de la sangre
y seduce a la bruma
con su quietud preñada de horizontes.


Ana Muela Sopeña

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

LA QUIETUD SE RESPIRA

*
La quietud se respira
en la hora que anuncia los presagios
con el frío adherido a sombras lúcidas.
Avanzo entre la niebla
y desciendo por rampas, entre el musgo
y los líquenes llenos del hastío.
Las piedras se conforman
con esa soledad de las mareas
que avanza silenciosa por las noches.
El viento me restaura
de agonías perpetuas y escondidas.
Experimento luz sobre mi rostro
y belleza de mundos invisibles
al contemplar las rutas sin memoria.


Ana Muela Sopeña

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

BARCAS DURMIENTES

*
Barcas durmientes
sonámbulas, sin prisa.
Tiempo sin tiempo.


Ana Muela Sopeña

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

SONIDO DE PENUMBRA

*
A Rosa Iglesias

Tu voz es un sonido de penumbra
que resuena en el mundo del poema
para hacernos sentir la vibración.

En medio de las aguas de la vida
siempre es grato escuchar
los versos pronunciados en la magia
de la palabra amada por las diosas.


Ana Muela Sopeña

martes, 17 de abril de 2012

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

EN LA ARENA SE HUNDEN

*
En la arena
se hunden
los
corazones
de
la
niebla
que se saben de memoria
los ciclos de Saros
de los eclipses de la luna.
Encuentran las palabras
en el diccionario de las nubes
y construyen los átomos
del tiempo consagrado a la quietud.


Ana Muela Sopeña


*****


Para saber lo que es un ciclo de saros:
http://neofosis.com/2011/06/el-ciclo-de-saros/

lunes, 16 de abril de 2012

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

NOCHE CERRADA

*
Noche cerrada
entre luces de sueño.
Belleza fría.


Ana Muela Sopeña

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

LAS HORAS SE HACEN LENTAS

*
El temblor de la noche se hace eterno
mientras diviso el cielo sin las máscaras.
Las horas se hacen lentas,
se diluyen en círculos de aire.
Me invade la quietud en el crepúsculo.


Ana Muela Sopeña

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

CONTEMPLACIÓN

*
Miro los barcos,
a los lejos las nubes.
Contemplación.


Ana Muela Sopeña

domingo, 15 de abril de 2012

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Fotografía: Ana Muela Sopeña

EN MEDIO DE LAS SOMBRAS

*
En medio de las sombras
camino por el muelle buscando las raíces
en nubes y pretiles.

La lluvia me disuelve en el vacío
mientras dejo mis huellas
en la estela del humo.

Adivino el instinto de la niebla
y escucho en el silencio
los pájaros nocturnos en sus ramas.

La belleza de un mundo mineral
me acompaña en el frío de la noche.

La humedad adormece mis sentidos
y el viento me sumerge en otro espacio.

De pronto veo a un chico haciendo footing
surcando el gran vacío.

Un poco más atrás
una patinadora entre la bruma
me sorprende cortando con su danza
la neblina de abril.

Unos niños risueños
avanzan con sus bicis
y me dejan atrás...

Sigo mi trazo único
contemplando los cielos
en la oscuridad del infinito.


Ana Muela Sopeña

BAJO MI ESTRELLA

*
Bajo
mi
estrella
tu
mirada
de sombra.
Una
luciérnaga.


Ana Muela Sopeña

sábado, 14 de abril de 2012


HAY UN HOMBRE

*
Hay un hombre
buscando signos en las piedras
de la ciudad desnuda.

Intenta seducir al calendario
con su visión certera del futuro.

Al despertar
de su sonambulismo de milenios
podrá evolucionar hacia otro tiempo,
donde el diálogo sea
una realidad
y el compartir un hecho cotidiano.


Ana Muela Sopeña

EN LA CALLE UNA MUJER

*
En la calle una mujer
se traga las palabras y anda muy deprisa
como si fuera una muñeca
exhibida en su jaula de cristal.

La furia es su alimento
y las hojas del drama son su historia.

Su medicina es sólo la luz
y quitarse las astillas de los dedos
liberando los ojos
de las briznas impresas en las visiones de lo arcaico.


Ana Muela Sopeña

ME GUSTA CUANDO ME RESPIRAS

*
Me gusta cuando me respiras con deseo.
Pertenecemos al mar de la lujuria
y vagamos hechizados por la temperatura inusual
de nuestros cuerpos.


Ana Muela Sopeña

UN SAUCE CON LA LUNA

*
Un sauce con la luna nos avisa
del alba en su portal del horizonte.
La penumbra se incendia
en un lago de jade
y una rana asombrada, en un grabado,
nos sonríe en la luz de los nenúfares.
El árbol del silencio
adivina el murmullo de la vida.


Ana Muela Sopeña

EXTENUADA

*
.....Extenuada camino por lugares donde las gotas de lluvia me van fertilizando y contemplo la realidad como si estuviera al otro lado del espejo entonces me doy cuenta de que siempre estamos en el lado que queremos estar o quizás no pero creo que sí es importante darnos cuenta de que tenemos un poder de decisión incluso cuando parece que no lo tenemos y si nos damos cuenta de ello podemos cambiar la realidad que nos rodea pero no es tan fácil por eso caemos en círculos viciosos de los que nos es difícil salir aunque al final salimos por lo tanto necesitamos recordar esos instantes que nos sacaron de la oscuridad y nos llevaron a otros espacios más luminosos si nos acordamos de esos precisos momentos las cosas pueden ser un poco más llevaderas y podemos lograr no quebrarnos de ese modo la existencia puede ser un poco más amable extenuada camino por lugares donde la luz de las fisuras invisibles me ayuda a sentir el goce natural de estar viva.


Ana Muela Sopeña

viernes, 13 de abril de 2012


NÁUFRAGA

*
Soy náufraga de ti, de tus abrazos.

Los murmullos del alba me despiertan
con el agua inundando mis raíces.

La memoria me lleva por lugares
de un desconcierto lúdico
y los párpados
delatan las ausencias en latidos.

Las dudas ya no están cuando te miro.

Las olas y la espuma, con las algas,
me nutren la matriz de tu energía.


Ana Muela Sopeña

jueves, 12 de abril de 2012

CADA PALABRA ES COMO UN TÓTEM

*
A André Cruchaga a propósito de su poema “Salvación de la luz”

Has salvado la luz
a través del espejo de visiones,
donde habitan los ojos de los sueños.

El cristal se hace nítido
en el cuarto que no olvida la historia.

La urdimbre de las sombras escondidas
se parece a esos muebles
con polvo acumulado de los años.

Has salvado la luz
en medio del temblor de los relojes
que conjuran las sílabas sagradas
con su tictac de arena y de deseo.

Un árbol, con la noche,
extiende sus raíces hacia el centro
de la Tierra que sabe de la sed.

Laberintos de piedras extraídas
de las grutas del tiempo
te muestran la verdad sin los disfraces.

Has salvado la luz
en el camino abierto de la vida,
más allá de la muerte y sus secretos.

La poesía es siempre tu refugio,
donde cada palabra es como un tótem
que te ampara en sus brazos
como al náufrago.


Ana Muela Sopeña

MI PIEL DANZA

*
Mi sueño habita en la penumbra,
en tardes que disuelven la neblina.
Mi piel danza en el rastro de tu mundo,
en la cadencia del deseo.


Ana Muela Sopeña

ÁLAMOS BLANCOS

*
Álamos blancos
en la noche del sueño.
Melancolía.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 11 de abril de 2012


SOBRE LA RÍA

*
Sobre la ría
hay una realidad que tiembla en la distancia.

Un barco con la noche me hace señas,
me recuerda en su historia
esos mundos exóticos perdidos
en la lejanía de la bruma.


Ana Muela Sopeña

ESPIRAL

*
La espiral del intento
me mira respirando en los cristales.


Ana Muela Sopeña

MELODÍA

*
Suena la melodía
en la ciudad nocturna
mientras hay un sonámbulo que huye.


Ana Muela Sopeña

martes, 10 de abril de 2012

HOY LA NOSTALGIA

*
I

Hoy la nostalgia
resbala por mi piel
sin vacilaciones.


II

La música en la noche
realiza su tarea
en el silencio sumergido.


III

Los pájaros errantes
se extravían a veces
en la distancia de la luna.


IV

La seda se vislumbra
en el mutismo sombra
de una lánguida tarde.


V

En medio del calor de los relojes
he descubierto un mundo evanescente,
donde la belleza se presagia en el crepúsculo.


VI

Las voces escondidas
nos hacen regresar a los inicios,
donde todo parece ser de fuego.


VII

He visto un árbol de nieve
recortado en el cielo de los sueños.


VIII

Visiones de la ría
con barcos que dibujan su aventura
contra el oscuro fondo de las aves migratorias.


IX

Aves de paso
somos todos a veces.
Contra lo efímero.


X

Las sílabas nocturnas nos poseen
mientras vamos de caza en el instinto.


XI

Amanece entre nubes ignoradas
mientras miramos sorprendidos
otra jornada que nos brinda sus opciones.


XII

Los búhos en su rama
nos recuerdan que todo es un misterio.


XIII

Te he visto en las imágenes oníricas
como un ser que solloza
cuando nadie le ve.


XIV

Un pájaro de niebla
me persigue sin pánico
mientras escapo entre portales de silencio.


XV

Una palabra oculta
podría ensimismarme para siempre.


XVI

No quiero que me veas cuando lloro
porque entonces podrías
abandonarme al ritmo
de las mareas escondidas.


XVII

Las letras son aliadas del destino,
las cuido y las espero cada día.


XVIII

Yo soy una vocal alegre y triste,
en medio de mi piel está la luz.


XIX

Tú eres consonante de los túneles,
te persigo y te creo a cada instante.


XX

Somos la creación inquebrantable,
asideros de bruma
en los acantilados de los lobos.


Ana Muela Sopeña

BAJO EL ÁRBOL SAGRADO

*
.....Bajo el árbol sagrado encuentro un código para sobrevivir en este tiempo, arrasado por mundos sibilinos que nos dañan el alma por la espalda. Cuando comienza el día voy soñando que todo lo que existe es un teatro y quizás pueda haber otro futuro para ser más humanos y creadores. Bajo la luna cruel seduzco al aire, para supervivir libre de heridas, en medio del amor y de la muerte. Aliada con la sombra y con la luz, para existir de nuevo renacida.


Ana Muela Sopeña

LA MUJER INVISIBLE

*
Camina por la ruta de las aguas
más allá de la herida que no muere.

Se entreteje en océanos
bajo los arrecifes de coral.

Su grito es enterrado
a veces con bozales muy antiguos,
otras veces con técnicas modernas.

Intenta ser la voz de las edades,
en medio de este caos que nos gobierna.

Se levanta de nuevo
entre las multitudes para ser
la memoria sagrada de la Tierra.


Ana Muela Sopeña

EL HOMBRE INVISIBLE

*
Deambula sin un nombre por la Tierra
intentando habitar el tiempo infame.

Busca siempre en las horas
su silueta,
para afirmar así todos sus códigos.
Entrelaza su piel con lo invisible
y resuena su voz en las mareas,
más allá de las formas inconclusas.

Alienado se alza
ante los poderosos del planeta
para lograr por fin ser más que un número.


Ana Muela Sopeña

lunes, 9 de abril de 2012

ME ESPERAN MUCHAS PALABRAS

*
A la vuelta de la esquina
me esperan muchas palabras
que viajan a las estrellas
y se esconden en el alma.
Son salvajes como el fuego
y habitan también en brasas,
agazapadas en sombras
y ocultas tras las ventanas.
En las calles silenciosas
los verbos juegan con tabas
a conjugarse en el viento
y expresarse con sus alas.
Los adjetivos del mundo
recorren siempre con calma
la belleza de la noche,
el sosiego de las casas.
Los versos van en su ruta
navegando hacia las zarzas
para encontrar sus enigmas
encriptados en mandalas.
Las sílabas de la vida
nos sorprenden con su dharma,
con movimientos divinos
de una existencia sagrada.
Atravesando infinitos
paraísos de luz blanca
las letras son el umbral
que nos conduce a la nada.
Consonantes encendidas
buscan las puertas del alba
para soñar sin disfraces
sus mitades embriagadas.
Las vocales nos subyugan
con sus sonidos de razas
abolidas por las manos
unidas en una danza.


Ana Muela Sopeña

DAME LA CUERDA BLANCA

*
Dame la cuerda blanca de tu infancia
para que yo la corte con mis dientes
y puedas respirar a plena luz.


Ana Muela Sopeña