*
Las palabras se ocultan en las calles
y sienten, con el humo de tejados,
la languidez de un mundo en decadencia.
Los transeúntes miran a lo lejos
los mensajes de otros transeúntes
a través de los móviles
y apenas los entienden.
Ya casi nadie escucha.
Los sonidos se elevan
en la ciudad de acero.
Se confunden los trinos con los coches,
los anuncios de agua de colonia
con la lluvia que impacta nuestro espíritu.
Las voces de los seres que se fueron
aún siguen sonando
en las nubes viajeras.
Hay ruidos de camiones
y rumor de los árboles en parques.
Las palabras se esconden
a pesar de la ira colectiva
que desea expresar el descontento
como erupción volcánica de siglos.
La ciudad es la música del tiempo
que nos lleva por cauces sigilosos,
donde nuestro fervor no silenciado
pueda encontrar el hueco hacia la luz.
Ana Muela Sopeña
*****
Móviles: Teléfonos móviles o celulares.
Mensajes de móviles: Sms o mensajes de texto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Muy hermoso poema, donde se mezcla la actualidad y las deshumanización de la ciudad y la añoranza de otros tiempos.
Saludos
Gracias, Ohma, me agrada que te guste.
Un abrazo
Ana
..."el descontento
como erupción volcánica de siglos"
Besos nocturnos.
Gracias, Soco, por venir...
Un beso
Ana
Publicar un comentario