miércoles, 5 de septiembre de 2012

MEDITACIÓN FUERA DEL TIEMPO

*
La soledad te lleva por fisuras
donde no existe el tiempo ni el espacio.

Las rosas se confunden con las sombras
y en túneles de luz
subyacen las palabras de la herida.

Hay lobos en los bosques
que aúllan a la luna
y esperan quietamente
que vengan en los trenes de la niebla
los hombres cazadores del acecho.

Los soñadores corren por visiones
hacia el cuántum del aire.
Y los acechadores
rememoran despacio cada noche
los códigos del tiempo.

La familia de luz
distribuye sus claves por la Tierra
para que las conciencias aún jóvenes
recuerden sin demora
el plan original de evolución.

La soledad te lleva por grietas escondidas
y por ellas emerges
a las dimensiones de los quarks.

Hay partículas ávidas de cambios.

Subatómicas piensan
que todos los humanos somos Uno,
esperando los códigos numéricos
que abran los archivos de la Diosa.

En Gaia la belleza
aguarda que nosotros
la liberemos pronto de lo denso.

Nuestro espíritu siempre constructor
se halla en mutación fuera de Mátrix.

Nosotros somos dobles
de nuestro clon que vive en plano etérico
en otra dimensión de la experiencia.

Recordamos despacio
frecuencias matemáticas
creadas para el cambio
como el número áureo
o ecuaciones de viajes en el tiempo.

Ahora sólo cabe recordar
para qué fuimos puestos en la Tierra,
más allá de los límites del miedo.

El olvido de fórmulas lumínicas
nos deslizó por campos de la muerte,
pero ahora ya estamos constelados,
para asumir el reto de lo cósmico
y unificar frecuencias interiores
con la galaxia blanca
vinculada a los campos de oración
y a planos invisibles
de la meditación durante el sueño.


Ana Muela Sopeña


4 comentarios:

Nahuel dijo...

tu siempre tan cosmogonica. Es como un viaje este poema. Saludos.

Nahuel.

Joaquín Galán dijo...

¿Tú crees que estamos constelados?
Pienso que es más verosímil aquello de preguntarnos por qué estamos aquí
y para qué.
Un poema un tanto esotérico,que nos transporta a otra dimensión que,no tengo ninguna duda,siempre será mejor que esta en la que estamos.

Un placer Ana.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Nahuel, es un placer verte.

Un abrazo
Ana

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias por brindarme tu opinión, Jerónimo.

Abrazos
Ana