jueves, 26 de septiembre de 2013

FUKUSHIMA

*
El mundo se despierta agonizante
más allá de las luces de neón
que cubren las ciudades de la muerte.

Zombis con traje
y corbatas de marca
se pasean sin máscaras de gas
por las urbes dormidas del planeta.

Mujeres biónicas
ataviadas con trajes  a la moda
reflexionan en básculas de acero
sobre sus cuerpos de reptil.

Nubes apátridas
amenazan con lluvia
a todos los lugares de la Tierra.
La lluvia ácida
nos hermana con Japón
y la zona excluida de Fukushima.

La especie duerme
en su cama de olvido
mientras Gaia planea la extinción,
mas en la línea de tiempo alternativa
aún podríamos abrirnos a la vida...


Ana Muela Sopeña

4 comentarios:

perfecto herrera ramos dijo...

Hola Ana
Cuando comienza a llover por esta tierra del sur, vuelvo por un momento a este laberinto de lluvia, para encontrar este hermoso poema, que leo, como siempre, con atención y sumo gozo.
Abrazos.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Perfecto, amigo, por venir y brindarme tus palabras.

Un fuerte abrazo
Ana

genetticca dijo...

Afortunadamente la renovación esta arraigada al esqueleto del ser humano. El átomo que crea es el mismo que destruye, pero entre una fase y la otra la creación se sobrepone,nada parece morir después de haber resucitado.

Un saludo

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Genetticca, por tu mensaje optimista...