*
A Lyubov Sirota
El tiempo subterráneo de la historia
se ha convertido en música de alarma
para no repetir el mismo error
y evitar la extinción de toda vida.
Un vagón de la infancia
te lleva por espacios escondidos
con la luna danzando entre los sueños
y la mirada puesta
en un futuro alegre
con infinito amor y creación.
Ana Muela Sopeña
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Surrealismo infinito muy propio de tus letras Ana.
Un abrazo desde mi helado amanecer.
Agradezco tus palabras, Taty:
Besos
Ana
Publicar un comentario