miércoles, 29 de julio de 2015


EN LEJANÍA

*
Tu esencia me hace sombra
entre los escenarios de la herida.
La distancia nos une en el silencio.
Tu voz en lejanía
me hace sentir tu alma.


Ana Muela Sopeña

VOLVER

*
I
Tus palabras parecen ser de niebla
en medio de las dudas interiores.

II
Mis preguntas son puentes del abismo
abiertos a los límites del alma.

III
Volver es el deseo de mi piel
que busca el fuego híbrido de ti.

IV
Sueños, quimeras,
la belleza del agua.
Esencia y sombras.

V
Contención de la bruma
sobre los precipicios de la herida.

VI
Mis manos hablan
con música escondida de galaxias.

VII
Nuestros inicios
sumergidos en lava,
como un volcán.

VIII
Lágrimas negras
adheridas a mundos primigenios,
envueltas en sonidos ancestrales.

IX
Respiración
mientras la noche pasa.
Un árbol llora.

X
Llueve en las calles.
La ciudad ha perdido
su misterio.
La desnudez del viento me fascina.


Ana Muela Sopeña

LÁGRIMAS

*
I
Una piedra de mármol
deja pasar la luz por su abertura.

II
El animal alado que nos mira
ve mis lágrimas siempre
cayendo sobre arena.

III
Un crepúsculo rojo
envuelve con el mundo
la tristeza infinita.

IV
El muelle en el silencio
abraza de las sombras la pregunta.


Ana Muela Sopeña

martes, 28 de julio de 2015


DERRUMBAMIENTO

*
El cuerpo sangra
mientras cantan los pájaros.
Desolación.

Sangra la herida,
mi alma está en la sombra.
Lágrima, exilio.

Naufragio, grietas
del espíritu apátrida.
Derrumbamiento.


Ana Muela Sopeña

lunes, 27 de julio de 2015


RECUERDO

*
A mi padre, en el quinto aniversario de su muerte


Viajaste al territorio de las sombras
para encontrar la luz en otro mundo.
Los años han pasado
y los atardeceres siguen siendo
la hora de la magia.

Recuerdo tu vivencia del presente
en medio de las pruebas de la vida,
tu lucha imperturbable hasta el final.

Ahora, en soledad,
sólo puedo sentir ese desgarro
de una existencia inerte
donde todo parece carecer de sentido.

Pero sé que en mitad de la tormenta
habitan los relámpagos azules
que hablan en silencio
de esperanza perpetua
en todos los instantes contenidos
en el pulso magnético
de la respiración de lo que existe.


Ana Muela Sopeña

domingo, 26 de julio de 2015


VÉRTIGO

*
Tu sombra me da miedo
y es de noche.
En lo oscuro reside todo el vértigo
que sientes si abrazaras en tu alma
la luz que no deseas ni mirar.


Ana Muela Sopeña

NOCHE DE LUNA

*
Una crisálida
en la noche de luna.
El viento frío.


Ana Muela Sopeña

EL ÁNGEL

*
El ángel no te deja nunca solo,
te dirige a las tumbas
donde se halla enterrada tu luz.


Ana Muela Sopeña

EN UN PRETIL DE PIEDRA

*
Nuestros labios recuerdan
la playa melancólica de bruma
y mi rostro encendido
un crepúsculo azul
con los ojos amados de la infancia.

La arena cae despacio
mientras cierro los párpados
y contemplo en la orilla las conchas incrustadas.

Tu cuerpo se hace niebla
entre la espuma blanca
y mis iris de luz
alternan con las olas la alegría.

Nuestras manos naufragan
en un pretil de piedra
y mi piel se confunde con el aire.


Ana Muela Sopeña

sábado, 25 de julio de 2015


LA OSA MAYOR, GUÍA EN LA NOCHE

*
Dubhe abre los caminos creadores
y es siempre un alfabeto eonario
para los buscadores de belleza.

Merak nos lleva por las grutas
encantadas con átomos de fuego
que persiguen la esencia de las cosas
en el quantum divino de la luz.

Phekda es recordatorio de otras vidas,
memorias ancestrales de los púlsares,
un sendero sin niebla para ángeles
ayudantes del humano.

Megrez nos silba la canción
de la octava galáctica.

Alioth es un lucero
que nos hace olvidar cualquier dolor.

Mizar nos brinda fuerza en la batalla
y nos alienta siempre a levantarnos.

Alkaid sabe de heridas en el alma,
por ello con su bálsamo nos cura.

Talitha Borealis es un lienzo
de proporciones áureas sin fisuras.

Talitha Australis canta melodías
mientras los tronos tocan sus trompetas.

Y Tania Borealis nos sosiega
con su armonía de otro tiempo.

También en Tania Australis ensoñamos
los presagios ocultos en relojes.

Alula Borealis nos invita
a transformar el odio en compasión.

Y Alula Australis hace la pregunta:
¿adónde dirigir nuestra existencia?

Muscida alberga siempre en su interior
los pulsos de la noche
sumergida en la onda del misterio.

Al Kaphrh es la guardiana de los sueños,
nunca nos abandona en el vacío.

Las estrellas brillantes
de la Osa Mayor
nos guían en la noche,
acompañan sin pánico a lo oscuro
nuestra alma atormentada por el miedo.

Transmutan nuestro plomo vacilante
en el oro sublime de los sabios.


Ana Muela Sopeña

viernes, 24 de julio de 2015


INMERSA EN LA NOSTALGIA

*
Las calles acompañan
mi soledad inmersa en la nostalgia.
Llevo el ritmo del viento
en mis manos que albergan
la esperanza.

Las aceras me brindan
una luz
que ilumina mi cuerpo en el estío

y los escaparates de las tiendas
se alían con la música callada
mientras vago dispersa
por la ciudad desnuda
que arroja sus cenizas a la ría.


Ana Muela Sopeña

EN OTRO MUNDO

*
Yo te quería
pero tú estabas lejos,
en otro mundo.
Y pasaron los años
y me mataste.


Ana Muela Sopeña

TU FRÍO

*
Me traicionaste
ocultándome todo.
Ahora estoy lejos.
No sé cómo pudiste
esconderme tu frío.


Ana Muela Sopeña

AÚN RECUERDO

*
Aún
recuerdo
tus
ojos
en
mis
ojos,
tu
cuerpo
cálido.


Ana Muela Sopeña

DE PRONTO

*
De pronto me he prendado de la luz
en universos solos, sin heridas,
y vago sin nostalgia
más allá de la sombra de los tristes.

Cabalgo a pleno sol
hacia nubes distantes y presagios
que actúan como hadas
y generan relámpagos de suerte.

De pronto he comprendido
que todo es un teatro
y mi experiencia es un acto escénico
escrito como un drama.

Me dirijo al umbral de la belleza
para crear sin trabas en crepúsculos suaves.

De pronto he visto claro
que sufrir es prescindible.
Nunca pensé que él sería eterno.
Creí que en un instante
se difuminaría entre la bruma...


Ana Muela Sopeña

jueves, 23 de julio de 2015


EL HECHIZO

*
Lengua de rana
en la marmita llena de estramonio.
Lagartos asfixiados por la luna
en el salón amado por la luz.
Sapos y culebras
aplastados con palos y con búhos.
Un hombre que encontró
la perdición
se mira en el espejo del hechizo
y pronuncia palabras ignoradas.
Un reloj detenido
se permite cantar la medianoche
mientras el mundo gira
sin pensarlo.


Ana Muela Sopeña

MELODÍA NOCTURNA

*
A Rosalía Linde

Por las calles desiertas de la ciudad de sombra
suena una melodía
que proviene de un pub casi vacío.
La gente se ha ido a casa
y las aceras tienen un misterio
que cabalga sin ruido
a través de las horas de la noche callada.

Deambulas muy despacio por parques y estaciones
buscando en el ambiente
señales escondidas en miradas.

Poco a poco el instinto de lo obvio
va cobrando el aspecto
de un sueño sumergido en otro sueño.

Tú, soñadora de mundos intangibles,
sostienes con tu luz las utopías
y respiras sin pánico a la niebla
mientras el tiempo pasa...


Ana Muela Sopeña

miércoles, 22 de julio de 2015


DANZA DE MARIPOSAS

*
A Pere Bessó, a propósito de su poemario "Pregonares la llum"


El sueño busca
el agua de la luz.
Un gato gris.
En la penumbra labios,
metáforas de rosas.

La desmemoria,
en la sombra la noche.
Piedra de luna.
Silencio de la flor
mientras la lluvia cae.

Pájaros negros
en sus nidos nocturnos.
Belleza cálida.
Aroma del deseo,
párpados de cenizas.


Ana Muela Sopeña

martes, 21 de julio de 2015

.






Fotografía: Mercedes Ridocci en la composición escénica "Quebranto"

RECUERDOS VELADOS

*
A Mercedes Ridocci, a propósito de su composición escénica "Quebranto"


Fluye el dolor
al golpe de la piedra,
en la soledad
más infinita.

Se quebranta el espíritu
mientras la lentitud
de lo que vibra
trae a los ojos siempre
los recuerdos velados
de una infancia perdida.

La mujer se repliega
en su hiel íntima
y permite que el viento
la lleve por lugares de locura.

Sopla un aire furioso
en mundos que bostezan a la tarde.

Los cuerpos permanecen
olvidados
a la vez que las rocas
observan el pasar,
el devenir eterno
de la sombra...


Ana Muela Sopeña




*****


Vídeo "Quebranto" de Mercedes Ridocci:
https://www.youtube.com/watch?v=RnBTDQ4cYgo


MÁSCARAS

*
Máscara del miedo
la que usas si todo se detecta
en
medio
de
la
luz
de
un
aguacero.
La verdad del relámpago es el dominio
antes de que el amor
convierta nuestros rostros en estatuas.

Máscaras de lluvia
amenazan con tiempos infinitos
agazapados siempre entre los álbumes
de las fotos guardadas por si acaso.

Máscaras de acero
cuando pido de ti tan sólo un roce
para soñar desnudos con el mar.

Máscara de pánico
en mitad de la sombra,
más allá de los límites
y los dibujos suaves de la luna.

Máscaras de flores diminutas
con pétalos y estambres
adheridos a campos de violetas.

Máscaras de jade
en el centro de un mundo en despedida,
en tus manos que buscan la belleza
envuelta en el cristal
de la penumbra.


Ana Muela Sopeña

lunes, 20 de julio de 2015


EL RITMO DEL POEMA

*
A Pere Bessó, a propósito de su poemario "Ephemera"


Las palabras se encuentran en la noche
de penumbras
cercadas por el hielo.
El
ritmo
del
poema
es siempre una razón para la luz
en medio del naufragio existencial.


Ana Muela Sopeña

ALBEDO

*
A Pere Bessó, a propósito de su poemario "La mort del pare"


Surge el fuego del mundo
en tus palabras despojadas de retórica.
La desnudez del viento
envuelta en la piel lúdica del mar.
Una danza de flores
que lloran con los árboles de invierno.

Al irse el padre todo se hace oscuro,
pero a la vez...
emerge lo real
de un precipicio absurdo hecho de sueño.

Un cuaderno de notas inconcluso,
la vida sin tapujos, lisa y llana,
el comienzo de un limbo indescifrable.
La pena va dejando en la conciencia
el poso del amor, la creación.

El nigredo por fin
se vuelve albedo.
Un viejo libro alquímico
deja ver las imágenes
de un camino iniciático,
esta vez sin retorno...


Ana Muela Sopeña

miércoles, 15 de julio de 2015


DOLOR

*
El dolor me carcome
las entrañas,
me lleva por abismos
donde no existe el tiempo.
Somos seres de sombra
que desprendemos humo
dentro de calendarios
con los días vacíos y nostálgicos.

El dolor me lacera
sin preguntas,
mientras la luna negra
me arropa con sonidos
de silencio.

El dolor me permite
ser de agua
y saber que estas lágrimas
aún retumbarán
en tu piel híbrida.

El dolor me conecta
con tu herida
al tiempo que tu sangre
huye de la locura del amor.


Ana Muela Sopeña

LA FRÍA SOLEDAD

*
La fría soledad
resquebraja mi alma en la tormenta,
me dispersa en la bruma del verano
y me arrastra por parques
y por túneles
donde no existe luz,
tan sólo la piel gélida
de una existencia gris y nauseabunda.

El dolor me convierte
en un cuerpo
que busca
la iluminación en el recuerdo.

Amo nuestros instantes sin historia
que permanecen mudos
flotando en las imágenes
de un sueño.


Ana Muela Sopeña

ADIÓS DESNUDO

*
Un animal de agua
me observa entre las sombras.
Mi piel va sumergiéndose
en un adiós desnudo.
Mi aliento mineral
recupera
lo
turbio
de las escenas blancas,
sin heridas.
Mi cuerpo se restaura de la niebla.
Avanzo poco a poco
hacia lugares limpios
donde consigo ser sin recovecos.


Ana Muela Sopeña

domingo, 12 de julio de 2015


MADRE

*
Madre,
ampárame en la niebla
del universo sólido del sueño,
donde mis secretos
sean custodiados por el mar.

Madre terrestre,
protégeme del invierno
en la arena desnuda
de la utopía
carente de sentido.

Madre oceánica,
custodia con tus relojes
mi tiempo consagrado a la belleza
y dame la cuerda blanca de mi infancia.

Madre lunar,
esconde bajo tu manto protector
el caleidoscopio de la luz
y arroja tu sombra lúdica
en medio del cristal del aguacero.

Madre planetaria,
descúbreme los misterios
de la noche,
mientras miro tu estrella
en el firmamento de la herida.

Madre solar,
dame la historia llena de peligros
en medio de los astros y la lluvia.

Madre galáctica,
vacía con tus ojos la desdicha
borda con hilo de oro
la bruma de la tarde,
atesora el enigma sin palabras.

Madre universal,
recibe con tus manos
la bruma sumergida en los recuerdos
y entrégame la sal de la esperanza.


Ana Muela Sopeña

CÁLIZ

*
Me conecté a las cuerdas
que te ataban a historias
del pasado
y te ofrecí mi cáliz,
oculto entre las piedras y la lluvia.

Te brindé la belleza
en un andén vacío.

La orfandad del instante
nos convirtió en los cómplices de arena.

Habité la ciudad
gracias a tus abrazos y tus besos.

Ahora,
vago como fantasma
por las calles de humo.

Resido en bancos fríos
que protegen el himen de las hembras
abandonadas siempre sin palabras.

Vivo junto a las fuentes, las estatuas...
que solitarias duermen
el sueño de los lobos.

Observo la ciudad
que somnolienta busca en el misterio
de la estación más cruel.

Camino quietamente
en la oscuridad de los suburbios
y cedo mi nostalgia
a los habitantes de la noche.

Palpo las utopías, las quimeras,
al deambular por sueños
y alucinaciones de locura
en las plazas amadas por la niebla.

Me ligué a tu piel fría
y la fui calentando
con mi brisa de fuego.

Disfrutaste de mí,
custodiado por pájaros de agua.

De pronto,
nuestros lazos saltaron por los aires
como si temieras el apego.

Ahora, recoger los cristales
del espejo
y andar nuestros caminos...

Ello como si nunca
nos hubiéramos pertenecido.

El Big Bang primigenio
que nos unió al principio
ahora nos ha vuelto a separar...


Ana Muela Sopeña

EL FARO

*
El faro es la expresión de la nostalgia
que se hace con la luz de los crepúsculos
nitidez descriptiva de las nubes.

Los pescadores saben de la espera.
Perciben con sus redes sensaciones
en anzuelos abiertos al destino.

A lo lejos gaviotas y misterios
adornando con lluvia
la melancolía del estío.

Camino muy despacio
por el espigón, sin la tristeza.

La arena de la playa es sólo un símbolo
del infinito amor del universo.


Ana Muela Sopeña

sábado, 11 de julio de 2015


QUIMERA

*
A veces el amor es la quimera.


Vemos sólo su esencia o leitmotiv
en medio de la lluvia y una nube.
Cantamos su misión y su tictac
entre las luces blancas y su duende.
Sabemos que su humo es como sombras.


El instinto del agua es un presente
lacerado en su cuerpo de cristal.


A veces el amor es la tormenta,
murmullos que se alojan en un álbum
oculto en jeroglíficos de lodo,
risas llenas de mundos al azar.


En medio de la suerte de la noche
serpientes que se enredan con crisálidas.


Sonidos que se esconden de los vientos
oleajes abiertos al naufragio.
La belleza se inhibe en lo abisal
ondeando en la arena del crepúsculo.


Un niño que viajó desde Ulurú
no conoce que sueña con su tren.


Su mundo es como imágenes de bosques
untados con disfraces de tisú.
En la estrella se ve siempre la muerte,
ñames muy nutritivos con su ñ
oscura como el manto de un vampiro.




Ana Muela Sopeña

jueves, 9 de julio de 2015


TARDE DE JULIO

*
Se encienden las miradas
en el corazón de la ciudad.

Sin palabras ni culpas
de nuevo...
complicidad en el estío.

Las horas pasan despacio
para sorprender a nuestros cuerpos
ávidos de caricias
y sensaciones de almizcle.

No importa lo que seas o que hagas,
eres un habitante de la noche
que vive entre la bruma
de un laberinto protector.

Comprendo la maraña sigilosa
en tu quimera vengativa.
Miro tus movimientos subrepticios
por la mirilla de tu puerta.

No importa lo que seas o que hagas.
Un día yo fui tú,
en un pasado remoto.

Ahora eres espejo de mi espacio
y jeroglífico sutil para mi alma.


Ana Muela Sopeña

miércoles, 8 de julio de 2015


COMO UN PÁJARO AZUL

*
El verano transcurre lento, solitario, como un pájaro azul caído en la nostalgia. Los coches a lo lejos sellan con sus sonidos la melancolía de la tarde. Respiro la emoción de medianoche y veo las estrellas custodiando las sombras del presagio. Las nubes se desplazan suavemente sobre los escenarios invisibles de los amantes clandestinos. El tiempo inexorable se sucede sin cambios en las aceras desnudas de la ciudad desierta.


Ana Muela Sopeña

martes, 7 de julio de 2015


SORTILEGIOS DE LA NOCHE

*
Cuadros de viento en las tardes oscuras de la lluvia, cuando todo se abisma en el silencio, para vengar la infancia entre las rejas. Óleos dormidos conjurando la magia de la vida, como un presagio. Lienzos abiertos a crepúsculos rojos y sonámbulos. Mundos de sueño. El pintor se hace uno con el agua con el color disfruta de las horas. El tiempo detenido en la distancia, la belleza que pugna por ser fuego como los sortilegios de la noche.


Ana Muela Sopeña