martes, 15 de noviembre de 2016

INVOCACIÓN NOCTURNA A LAS MUSAS

*
Calíope,
dame los nombres suaves de la luna,
ardientes como lava de un volcán
derretida en las noches de nostalgia.

Clío,
derrama tu luz blanca en los pronombres
para que al descubrirme yo cabalgue
por versos sumergidos en almizcle.

Erato,
eleva de la sombra
los verbos trabajados en crisol,
como los alquimistas del medievo.

Euterpe,
entrégame veloz los adjetivos
que definen el mundo de lo bello
en los acantilados de la herida.

Melpómene,
regálame las rosas de Saturno
con las preposiciones de otro tiempo.
Que yo sepa elegir el buen camino.

Polimnia,
baja a buscar a zonas abisales
los adverbios del reino más oculto.

Talía,
persigue con tus ojos
los artículos suaves de los bosques
y enséñame a  pulir los textos híbridos.

Terpsícore,
danza con los leones y los lobos
para que me acompañen al umbral
de las conjunciones sin fisuras.

Urania,
atraviesa la piedra con tu rayo
mientras me das sin pánico
las interjecciones siderales.


Ana Muela Sopeña

4 comentarios:

carlos perrotti dijo...

Concentrado saber. Ojalá supiera a escribir con tal naturalidad.

Abrazo.

Kasioles dijo...

Rodeada de las bellas hijas de Zeus y Mnemósine, has hecho una preciosa poesía inspirada en la mitología griega.
Ha sido un placer entrar en tu espacio y conocerlo.
He intentado visitar tu otro blog, pero no me deja hacerlo, da error.
Te deseo una buena semana.
Cariños en abrazos.
Kasioles

Ana Muela Sopeña dijo...

Bueno, no sé si hay naturalidad. El poema está muy estudiado...

Pero me alegra que te haya gustado.

Abrazos

Ana Muela Sopeña dijo...

Hola, Kasioles, gracias por venir.

El otro blog es:

http://www.poesiademujeres.com

Seguramente faltaría o sobraría alguna letra.

Abrazos
Ana