viernes, 25 de noviembre de 2016

MALTRATO Y LIBERACIÓN

*
A veces ella cree
que él decidirá cambiar y ser
aquel que conoció hace ya años.

Bastante le costó llegar a él
como para extraviarlo.
Decide aguantar,
aunque todo parezca ya un infierno.

Con un poco de suerte
quizás él reconozca sus errores.

De todos modos otros
también son insolentes.

Entonces un buen día
ella se hace la sueca.
Pretende que no importa
y que no pasa nada.

Fantasea con nubes de papel.
Supone que las cosas
llegarán a ser bellas otra vez.

Guarda en sobre de amianto
las pruebas de que todo es ya una farsa.

Hay momentos que piensa
romper con la atadura.

Irradia sufrimiento,
pero cree que la vida es sólo eso.
Resistir porque otras ya lo han hecho.

Juega en su pensamiento
a empezar otra vez, como si nada.

Kilómetros de instantes
la separan del mundo
y de la libertad de la conciencia.

Le paralizan muchos de sus miedos.

Llueven sobre su hogar lágrimas negras.

Mañana será el día
de la separación o del divorcio.
Mas hoy hay que intentarlo otra vez.

No cree que a ella le ocurran estas cosas.
Las otras viven rotos diccionarios
de hogares sin cimientos,
mas ella vencerá a la adversidad.

O quizás sea todo un mal sueño.

Porque todo se desvanece cada noche...

Quizás todo se arregle
cuando cambien de casa
o cuando ella consiga otro trabajo
o cuando a él lo trasladen...

Realiza cada noche el inventario.
Los pros y los contras.
Detalles para quedarse para siempre.
Argumentos también para dejarlo.

Si pudiera sentir la libertad...
Pero su apego es fuerte, ella lo sabe.

Traumatizada sigue...
y no, no es feliz,
pero el mundo le causa sólo pánico.

Una mujer casada,
infeliz porque nada es como antes.

Va a parecer que todo se derrumba
y construye los muros de la farsa.
Así, con autoengaños
estafa a la familia y los parientes,
también a los vecinos, los amigos,
menos a ella misma...

X es cromosoma diplomático.
Ella sabe que ahora
todo va a ser distinto, por supuesto.

Y prosigue en la barca del averno
hacia ninguna parte, sólo hay barro...

Zaherida prosigue en esa balsa
de un matrimonio errado de por vida.
Prosigue hacia la nada, ella lo sabe.

Zarandeada sueña
en terminar con todo
y comenzar de nuevo desde cero.

Y sabe que ya nada
podrá ser como antes.

X es cromosoma constructivo
que busca vida armónica y belleza.

Viene siendo corriente que ella crea
que las cosas no tienen solución,
pero ahora conoce que la tienen.
Todo empieza llamando
a alguien que la ayude.

Una mujer casada
que puede decidir dejar de estarlo.

Tatuajes de su alma
pueden borrarse siempre con esfuerzo.
Ya nada es permanente, todo es cambio.
El universo muta
desde la herida inversa de la piel
hasta la creación abierta y lúdica.

Sí, aunque no lo parezca
es posible saltar
en un paracaídas
hacia una vida plena.

Racionaliza entonces
y piensa que romper es lo mejor.

Quizás es el momento
¿por qué no?

Porque han pasado los años
y a pesar del esfuerzo
no ha cambiado nada.

O la vida se agarra
y se lleva a la luz
o un cáncer clandestino vencerá...

Nadie debe saber de sus angustias,
dejará a su marido en el silencio.

Mañana será tarde, ahora o nunca.

Llanto de la mañana
que ayuda a ser más fuerte
y a dejar situaciones ya caducas.

La luna siempre cambia.
Ella será una diosa
y mutará tranquila
liberando por fin su gran verdad.

Kárate aprenderá,
pero no en un gimnasio.
En su mente que busca el desafío
para encontrar valor
y romper ataduras...

Justifica en sus manos el naufragio,
pero quizás exista otro futuro.

Impaciente organiza
la huida hacia otro espacio.

Hay en su corazón
un poco de esperanza guarecida.

Guarda los alfabetos de la sombra
para que impulsen siempre en sus guaridas
el salto necesario.

Flaquea,
pero la decisión está tomada.
Ya sólo falta dar el paso...

En todos estos años
su matrimonio ha sido
un teatro de tiempos y de imágenes.

Daría lo que fuera
porque todo se hiciese sin gran daño.

Con su arsenal de olvidos
triunfará y abrirá todas las puertas.

Besa su imagen nítida
en los espejos ebrios de la casa.

Ahora es el momento.
Romperá sus cadenas
e iniciará otra vida
renaciendo...


Ana Muela Sopeña
Páginas 75,76,77 y 78 del libro "Mujeres que no callan"
Ediciones hturKesa
Editora: Ruth Pérez Aguirre
Lugar y fecha de edición: Tabasco, México, 2016.


Libro en el que hemos participado 63 mujeres con poemas y relatos
de diez países y quince estados de México.
El poema lo escribí el 25 de noviembre del año 2011

2 comentarios:

Teresa dijo...

Es un poema precioso. Saludos.

Ana Muela Sopeña dijo...

Hola, Teresa, gracias por venir y dejar tu huella entre estos versos.

Un abrazo
Ana