jueves, 2 de febrero de 2017

EL ÁRBOL INVERTIDO

*
Cuidado con el árbol invertido
de los diez Sefirots
que puede deslizarnos
hacia los precipicios tenebrosos.

Con Kéter invertido
en vez de providencia equilibrante
suceden los desastres más caóticos.

Jojma distorsionada
nos muestra la ignorancia
en su nivel más bruto.

Biná invertida
es la estupidez que no cesa.

Jesed invertida:
la crueldad y mezquindad.

Gevurá distorsionada y convulsa:
la injusticia y debilidad.

Tiféret invertida:
la fealdad horrible que da miedo.

Netsaj distorsionada:
la victoria de la muerte sobre la vida.

Hod distorsionado:
lo efímero de todo, lo maldito.

Yesod invertido:
lo inestable.

Maljut distorsionado
el anticielo, el principio del caos.

Nuestra sociedad civilizada
se encuentra en peligro,
al pulsar la inversión
del árbol de la vida.

Pero aún los relojes
están de nuestra parte.

La solución es fácil y difícil:
despegar nuestros párpados pegados
para así despertar del sueño oscuro...


Ana Muela Sopeña

2 comentarios:

carlos perrotti dijo...

Son funciones universales dentro de la propia vida, no?

Como si dijera el Sol, la Luna, las Mareas, las Estrellas, es decir emanaciones que influencian, afectan o estimulan la vida individual?

Me gusta que así sea. Naturalmente puede creer en eso. Porque puedo creer en lo que soy.

Abrazo, Ana, inspiradora poeta.

Ana Muela Sopeña dijo...

Los Sefirots del Árbol de la vida son emanaciones, sí.

Un fuerte abrazo
Ana