jueves, 21 de diciembre de 2017

SOLSTICIO DE INVIERNO

*
La mirada de sombra
se pierde entre los árboles
de la ciudad dormida en laberintos.

Transeúntes por calles y por plazas,
extraviados con rostros impasibles,
que traspasan el frío de diciembre.

El solsticio de invierno nos arropa
con sus brazos de luz en el crepúsculo.

Una mujer camina suavemente
mirando escaparates de las tiendas.

Un niño abre los ojos expectante
frente a jugueterías con sus luces.

Sueñan siempre los hombres que son hombres
mientras rompen los pactos tan sagrados.

Hay mujeres que aman sin llorar
y desnudan su alma frente al lago.

Las parejas se besan en portales
huyendo ciegamente
del pánico que vive en lo ancestral.

Imagino el instinto sin disfraces
expresar la belleza de lo puro.

Espejos de visiones
adoran la canción de la niñez.


Ana Muela Sopeña

2 comentarios:

carlos perrotti dijo...

"Imagino el instinto sin disfraces
expresar la belleza de lo puro..."

Certera mirada. Ante detecciones como ésta sólo queda asentir, conmovido. Enhorabuena. Desnudas lo que ves para exhibir lo que (en realidad) es.

Abrazo, Ana. Estás encendida.

Ana Muela Sopeña dijo...

El reencantamiento del mundo...

Abrazos