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A María García Romero, tras la muerte de su hermano Juan
Amiga, que imprevista es la existencia...
Ayer tenías a tu hermano junto a ti
y hoy lloras su partida para siempre.
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A veces la belleza de la vida
se parece a esos trenes que perdemos.
En mitad de los años nos bebemos
la tristeza terrible, la partida.
Las noches de verano dan salida
a esta noticia extraña y nos volvemos
hijos de lo invisible que sabemos
es círculo de agua en despedida.
Los lazos familiares nos ayudan
a superar el caos, el rayo amargo,
ese instante de niebla entre cenizas.
Las lágrimas de estrellas nos anudan
a un pensamiento antiguo, nuestro embargo:
un segundo de luz, hoy hecho trizas.
Ana Muela Sopeña
viernes, 15 de noviembre de 2019
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4 comentarios:
"A veces la belleza de la vida
se parece a esos trenes que perdemos..."
Una detección, un hallazgo, un poema en sí mismo que dispara decenas de poemas.
Abrazos, Poeta.
Me alegra que así lo veas, Carlos:
Un abrazo hasta Argentina
Ana
Perder a un hermano debe ser horrible. Un bonito homenaje para enjugar un poco las lagrimas de un amiga. Mi pésame para ella.
Un abrazo
Sí, desde luego a mi amiga María le ha afectado mucho. Su hermano solo tenía 46 años. Fue algo inesperado.
Gracias por tus condolencias, Albada
Besos
Ana
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