sábado, 18 de enero de 2020

QUIERO DORMIR


El cansancio me tiene trastocada. Solo acierto a mecerme con la luna en los brazos abiertos de las nubes. Solo quiero dormir mientras el viento ulula por las calles sin control. Deseo que el reloj avance y mida mi sueño entremezclado con las aves que migran a través de los crepúsculos. Mis sentidos precisan una cama para restablecerse plenamente. El cariño del gato es necesario. Que todo lo que gira en mi universo se pare por un tiempo, para ser una durmiente en busca de la paz y la energía lúdica del mundo.


Ana Muela Sopeña

6 comentarios:

Fackel dijo...

El cariño de uno mismo es lo más necesario. Magma interior cuyos grados se deben controlar, cuyo efecto medir, cuyo fuego reconducir. La imaginación es afectiva. El sueño es embargante. Dormir es una de las formas de quererse que tiene cada humano, acaso la más próxima y consecuente, aunque tampoco siempre sea fiel.

carlos perrotti dijo...

Pusiste en palabras lo que tantas noches de inexplicable insomnio... Voy a pensar y paladear este texto en la próxima.

Abrazo agradecido, amiga!!

Ana Muela Sopeña dijo...

Dormir es una medicina fabulosa para superar el agotamiento. Yo estoy extenuada por cuidar a mi madre que tiene 94 años.

Necesito descansar

Ana Muela Sopeña dijo...

Me alegra, Carlos, que te guste este texto de prosa poética.

Un beso grande

soco luis fernandez dijo...


Dormir. Soñar.Dejarse, Quererse. Tal vez olvidar...

Pienso que la prosa poética puede ser mas íntima y sincera, mas personal y directa que el poema, acaso porque no tiene que ajustarse a sus reglas métricas.

Un beso enorme, Ana

Ana Muela Sopeña dijo...

Sí, la prosa poética siempre es más libre que el poema en verso.

Un fuerte abrazo