viernes, 10 de enero de 2020

TEJADOS SILENCIOSOS


En la sombra percibo
la luz de la belleza
sumergida en las calles
y sobre los tejados silenciosos.

Hay un muro que observa
el amor contenido en las miradas
y en la melancolía de la herida,
mientras los besos alzan su temblor.

Las estatuas contemplan
los gatos que se esconden bajo coches,
en la respiración de lo que existe.

Un conjuro de niebla
danza como la lluvia en su nostalgia
y habita sobre el sueño en la memoria.


Ana Muela Sopeña

8 comentarios:

carlos perrotti dijo...

Alto poema, amiga. En la memoria me lo llevo.

Abrazos, Ana.

soco luis fernandez dijo...


Siempre recurrente el embrujo y la belleza del paisaje en el poema.

Un abrazo largo, Ana.

Ana Muela Sopeña dijo...

Es una alegría que el poema te guste, Carlos.

Un fuerte abrazo
Ana

Ana Muela Sopeña dijo...

Es un placer saberte como lextora, Soco:

Besos y abrazos
Ana

Ana Muela Sopeña dijo...

Lectora (he querido escribir).

Laura dijo...

En los tejados te espero.
😊
Besos.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Laura, por brindarme tus palabras.

Un fuerte abrazo

Albada Dos dijo...

Bajo un coche no, pero sobre los tejados, puedo ser gata sin dueño :-)

Un abrazo