Dibujo sobre arena
tu nombre sumergido en la distancia.
Las olas van borrando lo que escribo.
Vuelvo a escribir tu nombre,
esta vez en las rocas.
Permanecen las letras
adheridas al tiempo de los astros.
Abandono el lugar del sortilegio
segura de llevarte
para siempre conmigo,
aunque ya nadie nos vea nunca juntos...
Ana Muela Sopeña
14 comentarios:
Ana querida hermosos versos, que se
adhieren al alma y jamas se borran,
cuanto sentimiento.
Besitos dulces
Siby
Un versar con mucha nostalgia y amor desbordado, el recuerdo se queda por siempre en tu corazón, muy lindo.
Que tengas un buen fin de semana Ana
A veces el amor permanece cuando ya se ha ido...
Un beso
El recuerdo vive...
Abrazos
Lo malo de los besos es que crean dicción :-). Por eso se recuerda, ante el mar con mayor frecuencia, lo que hubo y se vivió
Un abrazo
El mar con sus mareas nos hace recordar primero y después... olvidar...
Un poema muy preciso y medido, y de paso conjura. Todo eso me gusta.
Muchas gracias, Fackel, tu paso por estos versos me alegra el día.
Abrazos hasta tu ciudad
Amar supone jamás olvidar. Es más, si lo puedes olvidar, creíste amar... y probablemente no ha ocurrido jamás.
Abrazo gigante, Poeta!!
ANA...
O mar e o gelo apagarão todos os sinais, mas a memória da recordação continuará na tua lembrança...
Un beso!
Me has recordado una foto (con esta entrada) voy a ver si la encuentro y puedo editarla. Gracias.
Besos.
Tienes razón, Carlos:
Un beso
Sí, Albino:
Un abrazo grande
Estupendo.
Me gusta mucho tu blog de fotografías tambièn, Laura:
Un beso enorme
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