viernes, 8 de enero de 2021

LA NOCHE DESIERTA

Tras el toque de queda

la noche con sus calles

permanece desierta hasta las seis.


Todo tiembla en la música 

del vacío que anida en los portales.

Hay viento sibilante...


Las horas se deslizan

dentro de los secretos de la magia

y un columpio dormido

en un parque infantil, hoy solitario,

avanza quietamente

hacia la incertidumbre del mañana.


La ciudad va trotando 

sobre los adoquines,

dentro de los misterios consagrados

a la búsqueda única del fuego.


El ambiente nocturno es un teatro

que ignora la canción de la alegría.


Hace frío y los dedos

se quedan ateridos

con el relente helado

de la madrugada silenciosa.



Ana Muela Sopeña

6 comentarios:

Siby dijo...



Es cierto mi amiga, en esas noches
desiertas y con toque de queda,
solo se oye el silencio que grita.

Besitos dulces

Siby

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias por tus palabras, Siby:

Un beso enorme

A.S. dijo...

Ana,

Na madrugada silenciosa,
ardem as estrelas que não vejo
o frio congela os dedos.
Temos apenas a lembrança
de noites ardentes...
Agora, somos como a lua,
fria e distante
amante
imensa
e nua...

Un abrazo enorme!

Albada Dos dijo...

las madrugadas urbanas, ofreciendo sombras y recuerdos. Muy chulo

Un abrazo, y feliz día

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias infinitas por brindarme como respuesta tus preciosos versos, Albino:

Un beso enorme, amigo

Muitos beijos

Ana Muela Sopeña dijo...

Siempre es un placer verte enredada a mis versos, Albada:

Un beso