viernes, 9 de abril de 2021


 

8 comentarios:

Meulen dijo...

me recuerda a columpios abandonados ...cuando no hay niños que puedan jugar libremente al viento...

Ana Muela Sopeña dijo...

Espero que pronto cambie esto y los niños puedan columpiarse con libertad. Lo necesitan ellos y nosotros.

Un abrazo

Fackel dijo...

¿Por qué será que cada vez que veo un columpio desocupado tengo un impulso -que enseguida reprimo- de ir corriendo a ocuparlo? En busca del balanceo que me haga alcanzar las nubes.

Ana Muela Sopeña dijo...

El niño que fuiste vuelve a irrumpir. Es un anclaje, supongo.

No sé por qué dejamos de columpiarnos. Era fantástico.

A.S. dijo...

Oh!...Triste como um coração sem amor!

Besos!

Ana Muela Sopeña dijo...

Los columpios solitarios siempre son un poco tristes...

Un beso enorme

Jorge M dijo...

Esos columpios me traen recuerdos.
Deseo estés muy bien Ana, te quiero.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, a mí me encantan los parques infantiles. La pena es que últimamente están un poco vacíos por las restricciones.

Un beso