Los barcos aparecen entre niebla
mientras dejan la luz bajo las nubes
de un horizonte lleno de presagios.
Las gaviotas descienden hasta el agua
al tiempo que en el alba
se transfigura el arte
de la contemplación y la belleza.
Los colores del cielo
presienten que muy pronto habrá tormenta.
En el embarcadero,
la casita flotante
refleja como espejo
la felicidad de lo sencillo.
La gente atareada
respira con el sol la energía del día.
El ritmo de la vida continúa,
incesante en sus luchas.
Poco a poco las horas de bullicio
se adueñan de las calles.
La ría del Nervión se despereza
y nos regala su abundancia.
Ana Muela Sopeña
12 comentarios:
El bullicio que tanta vida encierra , abre y comunica.
Besos.
Nostálgico y bello, bonita estampa.
:)
"Los colores del cielo presienten..." Qué gran verdad detectaste e hiciste verso en tan maravilloso poema, Ana.
Abrazo gigante.
Contemplar el paisaje y sentirlo presente ,como el marcador de todo..
Aquí se supone primavera , pero llueve sin cesar...
Has pintado con tus versos un paisaje que es una hermosura, digno de ser contemplado.. Cuanta belleza en tus letras y ese final poético tan bonito!!!Besossss querida Ana!!!
Es un poema entre escenarios oníricos e inspiradores. Me gustó.
Un abrazo
Gracias, Amapola, es un placer que te gusten estos versos.
Un beso
Muchas gracias, Carlos, por venir y brindarme tus palabras.
Un beso enorme
Aquí estamos en otoño y hace un tiempo raro. Calor y frío a la vez. Como si se juntaran varias corrientes de aire.
Un beso
Agradezco tu visita
Me alegra que disfrutes del paisaje a través de estos versos, Eli:
Un beso enorme
Muchas gracias, Albada, por venir y pasearte entre estos versos.
Un beso grande
"Tots els matins del món són un camí sense retorn", es deia a la pel·licula Tots els matins del món. M'hi fas pensar.
Cuando me encuentro baja de moral y de ánimo contemplo un amanecer o un atardecer y se me pasan todos los males. Son momentos mágicos en los que la luz y la sombra guardan el equilibrio perfecto.
Un beso grande
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