martes, 2 de noviembre de 2021

CANTO DEL LOBO


Un lobo merodea entre la niebla

hay un bebé en la casa

y el lobo no ha comido en muchos días.


Yo le susurro al lobo que se vaya.

Está hambriento y muy triste

pero a mí no me importa.

Voy a darle una cola

de algún animal gris,

para que se entretenga.


No te permito, lobo,

comerte a mi bebé.


El lobo está nostálgico,

deambula sin destino

entre la bruma fría

de este mes de noviembre tan lluvioso.


Los ojos del bebé

no miran los peligros.


Le grito al lobo que debe marcharse.

No me importa que sufra.

Yo solo quiero el bien de mi bebé.


Los ojos de este lobo

me miran sin excusas.

Él necesita pronto devorar

una carne blandita.


Pero a mí no me importa.


A mí solo me importa mi bebé

al que protejo siempre de lo oscuro.


Agarro la escopeta

y le meto dos tiros a este lobo.


Me entristece su muerte,

pero yo solo quiero a mi bebé

y los depredadores causan miedo

y producen peligro por las noches.


Mi niño ya se duerme sin el lobo.

Sus aullidos dan paso a un gran silencio

que el bosque sepulcral deja en la nada.



Ana Muela Sopeña



14 comentarios:

A.S. dijo...

ANA!
Um belo conto em forma de poema!
Os lobos famintos são perigosos e persistentes!

Besosss para ti!

Fackel dijo...

Y cuando el bebé crezca, ¿qué cuento del lobo le contarás?

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Albino:

Es una especie de canción de cuna.

Un abrazo

Ana Muela Sopeña dijo...

No tengo ni idea...

Cuando un bebé crece ya no quiere más cuentos.

Un abrazo

Carmela dijo...

Hay demasiados lobos en la noche.

Un beso, Ana.

Ana Muela Sopeña dijo...

Ya... es verdad...

Es lineal y metafórico al mismo tiempo.

Un placer verte por aquí, Carmela.

Besos a montones

soco luis fernandez dijo...


Qué simpático...

A mí de pequeña me regalaron un bebé de lobo. Era precioso, pero no me lo dejaron tener mucho tiempo. Y todo lo que lloré cuando se lo llevaron...

Abrazo, Ana.

Ana Muela Sopeña dijo...

Normal. Los lobos son hermosos, pero no se pueden domesticar. No pueden ser mascotas.

Un abrazo

Albada Dos dijo...

Los lobos son crueles proque matan más de lo que luego s ecomen, pero ese bebé parece estar muy bien defendido.

Un abrazo

Meulen dijo...

Bueno, es las decisione slas que nos persiguen...aún a este tiempo hay que tomar ese tipo de decisiones que el lo más valioso para un padre o madre en relación asus hijos y actuar.

Ana Muela Sopeña dijo...

Cuando alguien o algo es un depredador no hay otro remedio.

Un abrazo

Helena Bonals dijo...

Fan molta por, els llops! La humanitat els ha transformat en gossos per necessitat. Kundera diu que el llop és obra de Déu, un gos és obra de l'home.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Albada, por venir:

Un beso enorme

Ana Muela Sopeña dijo...

Muchas gracias por tus palabras, Helena:

Besos a montones