El mundo tiembla ahora, sin palabras, a través de los miedos que la guerra suscita en las personas. Contemplamos con pánico, expectantes, las noticias del día. Todo se desarrolla como un sueño. Creemos cada instante que nada es como parece. La realidad se torna una película, pero a pesar de todo está ahí. Una verdad que arrasa la conciencia. Una verdad incómoda. Una verdad difícil de mirar. La oscuridad más lóbrega...
Ana Muela Sopeña
10 comentarios:
Una verdad cada vez más mentirosa, Ana...
Abrazo hasta vos, Poeta!!
¿Tiembla más porque nuestro ombligo nos dice que nos pilla más cerca? ¿Por que todo puede volverse contra nuestra comodidad y distancia fingida? ¿No tembló cuando Bosnia, Irak o Siria, por citar tres casos de gran dolor que no están resueltos, pero que no nos parecían cercanos?
La mentira y la verdad son siempre verdaderas, no nos engañemos.
Vendrán más años malos y nos harán más ciegos, decía Rafael Sánchez Ferlosio.
Un abrazo.
Es difícil enterarse de todo...
Me encantaría saber las respuestas a las incógnitas que planteas... pero no las sé...
Hace días que escribo la palabra horrible...pero como dice Fackel todo es tan lejos para nosotros aquí en Uruguay que lo vivimos como algo irreal. Quién sabe cuales serían mis palabras si fuese en Argentina o Brasil. Estaría temblando de miedo por mis hijos varones y por la terrible certeza de que no hay nada que podamos hacer!! Hasta hace una semana nos hacían sentir culpables por no vacunarnos y hoy deberíamos mandar nuestros chicos a la guerra?
Proximidad por un lado y grado de implicación son variables a tener en cuenta.
Un suceso que no debe mantenernos impávidos y sin vigilancia
...ya sabemos lo que hace la sinrazón por tantas partes de esta tierra.
Aún así esto y más levante el velo y llame a tomar conciencia al menos...
Es importante tomar conciencia, sí.
Un beso enorme, Meulen
"Una verdad incómoda": tu ho has dit.
Miramos, pero no queremos mirar.
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