A veces el instinto de partida
nos lleva por senderos de belleza
mas nos causa dolor en la cabeza
hasta ser invisibles en la vida.
Perseguimos sin pausa la salida
atrapada en la piel de la maleza
con burbujas de luz en la destreza
que busca una fisura bienvenida.
Entonces abrazamos sin la suerte
las tareas de sombra ya iniciadas
y vamos en caída hacia el abismo.
Nos ataca sin máscaras la muerte,
nos persigue por túneles y estradas
y entendemos la clave del cinismo.
Ana Muela Sopeña
4 comentarios:
Un buen soneto, con esas reflexiones de la toma de decisiones.
Me gustó mucho. Un abrazo
Gracias, Albada:
Un placer verte por aquí.
Me encanta que el soneto te haya gustado.
Un beso enorme
Se te dan bien los sonetos. Ay, las claves del cinismo. Las tenemos al alcance y muchos no quieren verlas.
Gracias, Fackel, por acercarte a este soneto y brindarme tu comentario.
Las claves del cinismo a veces están a la vista y no las queremos ver...
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