martes, 10 de abril de 2012

HOY LA NOSTALGIA

*
I

Hoy la nostalgia
resbala por mi piel
sin vacilaciones.


II

La música en la noche
realiza su tarea
en el silencio sumergido.


III

Los pájaros errantes
se extravían a veces
en la distancia de la luna.


IV

La seda se vislumbra
en el mutismo sombra
de una lánguida tarde.


V

En medio del calor de los relojes
he descubierto un mundo evanescente,
donde la belleza se presagia en el crepúsculo.


VI

Las voces escondidas
nos hacen regresar a los inicios,
donde todo parece ser de fuego.


VII

He visto un árbol de nieve
recortado en el cielo de los sueños.


VIII

Visiones de la ría
con barcos que dibujan su aventura
contra el oscuro fondo de las aves migratorias.


IX

Aves de paso
somos todos a veces.
Contra lo efímero.


X

Las sílabas nocturnas nos poseen
mientras vamos de caza en el instinto.


XI

Amanece entre nubes ignoradas
mientras miramos sorprendidos
otra jornada que nos brinda sus opciones.


XII

Los búhos en su rama
nos recuerdan que todo es un misterio.


XIII

Te he visto en las imágenes oníricas
como un ser que solloza
cuando nadie le ve.


XIV

Un pájaro de niebla
me persigue sin pánico
mientras escapo entre portales de silencio.


XV

Una palabra oculta
podría ensimismarme para siempre.


XVI

No quiero que me veas cuando lloro
porque entonces podrías
abandonarme al ritmo
de las mareas escondidas.


XVII

Las letras son aliadas del destino,
las cuido y las espero cada día.


XVIII

Yo soy una vocal alegre y triste,
en medio de mi piel está la luz.


XIX

Tú eres consonante de los túneles,
te persigo y te creo a cada instante.


XX

Somos la creación inquebrantable,
asideros de bruma
en los acantilados de los lobos.


Ana Muela Sopeña

4 comentarios:

Nahuel dijo...

me gusto mucho, lo lei en voz alta. Una gran sorpresa.

Saludos, Nahuel

Ana Muela Sopeña dijo...

Hola Nahuel, siempre es una alegría verte por aquí.

Un abrazo
Ana

Auralaria dijo...

Muy sugerente, Ana. Se abren interrogantes. Enhorabuena.

Ana Muela Sopeña dijo...

Gracias, Auralaria, por venir y dejar tu huella generosa.

Un abrazo fuerte
Ana