*
Dame la mano
para sentir el pulso de la vida
en nuestra piel abierta al universo.
Te doy mi mano
en los espejos ebrios de lascivia
cada vez que me rozas
en las habitaciones más ocultas.
Ana Muela Sopeña
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
6 comentarios:
sensual, incauto, divino.
Saludos, Nahuel.
Hola Nahuel,
es un placer verte entre mis versos.
Un abrazo
Ana
Hermoso poema donde el erotismo es siempre la sugerencia. Me ha gustado mucho. Un abrazo y feliz fin de semana.
Julie, gracias. Me encanta que el poema te haya gustado.
Un beso
Ana
Las hermosas habitaciones repletas de espejos...
Gracias por venir...
Publicar un comentario