*
El velo del misterio
se oculta entre la niebla
y seguimos por años caminando
en el olvido exacto de la voz
que orienta hacia lo íntimo.
Un día despertamos
y descubrimos eso
que durante tanto tiempo
hemos querido sepultar.
Un murmullo inaudible
que nos habla en la bruma
de todo lo que un día abandonamos
por desidia o temor a lo vacío.
Abrimos los umbrales de lo auténtico,
respiramos el aire
y un viento de poniente
nos roza la piel fría y nos alumbra.
Ana Muela Sopeña
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2 comentarios:
encantador el ultimo verso. Un placer leerte.
Saludos.
Gracias, Nahuel.
Un abrazo
Ana
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