*
Un hombre en el andén
se arroja bajo el metro
justo cuando ya es tarde
para poder frenar.
La gente sigue pasando
como si no ocurriera nada.
Dos hombres lo recogen de las vías.
La ambulancia
llega enseguida.
Desfibrilador...
pero...es ya muy tarde...
Decenas de personas
miran para otro lado
y siguen su trayecto
como si nada...
Ana Muela Sopeña
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6 comentarios:
Sentida instantánea urbana. Fuiste testigo?
Abrazo, Ana...
Una amiga mía fue testigo...en Madrid y me lo contó...
Besos
Ana
Algo más coloquial, más cotidiano que tu estilo acostumbrado, buenas nuevas corrientes.
Saludos, Nahuel.
Qué poco vale una vida...
Y como hiere la insensibilidad, la indiferencia por el otro...
Besos, Ana
Gracias, Nahuel:
Me alegra verte por aquí, poeta...
Besos
Ana
Así es, Soco, un hecho terrible.
Me lo contó una amiga poeta que vive en Madrid y me impactó.
Un beso grande
Ana
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